Pues yo tengo 44 y como tú (creo que gano a todos por goleada). ¡Y todavía no me he muerto! (espero además durar unos cuantos años).
Reconozco que es algo fastidioso, sobre todo cuando tenía tu edad, pero con los años yo al menos me he ido acostumbrando y ahora qué quieres, incluso de alguna manera me hace sentir "especial".
En cualquier caso creo que los consejos expuestos son buenos: La única manera de superar ésto, si realmente quieres, pasa por arriesgar y deberás estar dispuesto a asumir el fracaso en muchas ocasiones (especialmente al principio) - Esto te va enseñando, dando experiencia y con el tiempo seguro que al final encontrarás a la chica que buscas. No es que sea el más indicado para dar consejos en esta materia
, pero por otras experiencias de la vida y por la forma en que funciona esta p... sociedad estoy seguro de que es la única solución.
En definitiva, a mi juicio la clave está:
- Decide si realmente quieres romper esa rutina y pelear por ese objetivo: Creo que este es el aspecto fundamental para solucionar tu "problema". Yo esta batalla interna la perdí (fui incapaz de ello cuando tenía tu edad y tu energía y ahora, a estas alturas, sí que lo veo completamente imposible).
- Si optas por asumir el reto, entonces sigue los consejos que te dan aquí. Ya verás como antes o después verás cómo la cosa cambia, aunque ármate de paciencia ya que, sobre todo al principio, no verás prácticamente avances.
- Si optas como yo, por no asumir este riesgo, entonces debes pasar página y no obsesionarte, quitándole importancia y buscando otros objetivos en la vida que pueden llenarte tanto o más que una compañera. Te advierto que cuesta (y te lo digo por experiencia), pero es importante hacerlo ya que si te obsesionas terminarás cayendo en una depresión o algo peor.
Quizás en este caso te pueda venir bien algún desahogo con profesionales, aunque eso dependerá de tu personalidad. Yo particularmente nunca fui capaz de ello (no sé si por miedo propio o por respeto al prójimo, pero la verdad que no me veo cómodo compartiendo mi intimidad con una persona que si está conmigo en ese momento es por dinero), y actualmente prefiero conservar esta intimidad para alguien que merezca la pena, y si no llega pues qué le voy a hacer, el mundo se lo perderá y allá ellas...
En fin, dale tiempo al tiempo y verás cómo solucionas tu problema: ¡Si lo que sobra en este mundo son mujeres! (casi tantas como hombres, no vayáis a pensar...).