Yo viví más o menos desde los 14 hasta los 24 años muy cerca de una antena de telefonía móvil, y no noté que mi salud física ni mental empeorara o mejorara significativamente como para echarle la culpa a la susodicha antena.
Hoy en día, hay tantas señales por los aires, que si el móvil, que las ondas de radio, que el microondas, el wifi (cuántos routers wifi habrá en una manzana?), el cableado de los edificios que crea cargas magnéticas que causan problemas en las células, el respirar aire "reciclado" en el trabajo, beber agua del grifo con tooooodos los contaminantes que poco a poco se acumulan, el atún con el mercurio, las hormonas de la carne, la enfermedad de las vacas locas que no sabes si tienes hasta pasados unos 10 años, la industria farmacéutica enfermándonos en vez de curarnos para seguir ganando pasta, los médicos que son sus cómplices, etc etc etc etc. Joder es que hay demasiado como para querer irse a vivir a una montaña alejada de la sociedad viviendo como ermitaños...
Yo me preocupaba mucho por todo esto, y sí, aún me dan mis temporadas de paranoia con X o Y asunto, pero luego me digo "Y qué tal que me muero mañana porque me aplasta un autobús???
Me preocupé todo este tiempo sin vivir tranquila y me muero aplastada sin importar cuánto mercurio o tumor cerebral pudiera existir en mi cuerpo!!!!"
O sea que.... no gastes dinero en esas cortinas de alemania, que al final creo que las ondas traspasan la pared..... disfruta tu vida que nadie sabe de qué se va a morir.