Dr. H. en Psicofilosofia Alejandro Galizia Martínez (padezco bipolaridad, síndrome de piernas inquitas y TDH desde hace mas de 20 años)
La Psicofilosofia y la bipolaridad
La vida anímica de los seres humanos funciona a través de una continua oscilación vital, esta es la manera en que las personas logran un equilibrio emocional que podría llamarse constante, pero hay que comprender que cuando decimos oscilación, nos referimos a algo que no es una línea recta.
Al igual que cuando alguien monta una bicicleta y para mantearse en equilibrio debe realizar pequeños y casi imperceptibles movimientos, lo mismo ocurre con nuestra mente nuestras ideas y deseos.
Si tratamos de mantener siempre los mismos pensamientos y acciones no lograremos mas que caer en una neurosis, pero si en algunas partes de ellos podemos ser algo flexibles para lograr adaptarnos con plasticidad a los cambios impuestos por el medio ambiente, en el cual vivimos y nos desarrollarnos, podríamos llegar al equilibrio anímico antes mencionado.
En el caso de las personas bipolares, esto es totalmente distinto, el único equilibrio es el desequilibrio constante, pero si uno no padece este mal difícilmente lo comprenderá en profundidad.
Me voy a valer de unos sencillos gráficos a fin de ahorrar palabrerío.
Personalidad neurótica
Oscilación vital (personalidad normal)
Lo que los demás piensan de una personalidad bipolar
A pesar de existir algunos psicofármacos que pueden ayudar en esta patología, el diagnostico mas común es el suicidio, pero desde el punto de vista de la psicofilosofia esto no es tan cierto, para nosotros el diagnostico mas certero el casi constante deseo y los múltiples intentos de suicido.
A la persona bipolar podríamos decir, que muchas cosas le cuesta realizar, que a al hora de hacer algo difícilmente esto salga bien, y acabar con su vida no es mas que una de estas tantas cosas que salen mal, si no fuese porque la psicofilosofia se basa en el principio de que cada vida por patológica o errada que sea aun conserva un gran valor intrínseco, diríamos que el que padece esta brutal enfermedad y lo logra es un afortunado, pero en verdad que no es así.
Pero la gran pregunta es, ¿se puede tener una vida normal siendo bipolar?
La respuesta desde la Psicofilosofia es la siguiente: si somos bipolares de hecho no somos normales, así que dejemos la idea de una vida normal a las personas “normales” ¡y vivamos la nuestra como bipolares a pleno!
¿Cómo?
Primero rompamos de lleno con el ego, el orgullo y el tratar de encajar.
Arrojemos muy muy lejos nuestro, el sentido de culpabilidad por nuestros actos, los cuales seguramente molestan o incluso pueden llegar a dañar la sensibilidad de los demás.
Seamos extravagantes, excéntricos, y dejemos de pensar que deberíamos tener el empleo mejor remunerado, el titulo más honroso, la familia perfecta, y en cambio animémonos al riesgo de vivir tal cual somos, sin miedos, pero nunca dejemos de advertir a los demás que somos bipolares para que no nos confundan con personas “normales” ¡como si estas en realidad existiesen!!!
¿Porque en ves de suicidarnos, no nos convertimos a nosotros mismos en los ser mas libres de este planeta lleno de cadenas?
Si ya estamos muertos al igual que todos, solo es cuestión de tiempo, la vida y la muerte son solo ilusión, el hoy es lo único verdadero, mañana no sabremos que pasara y de ayer apenas nos quedan registros reales en la memoria, por mas sana que este una persona mentalmente de todas formas no deja de rehistorizar su ayer, su pasado, para hacerlo mas tolerable.
No sienta que usted es un estorbo para los demás, al contrario ellos lo son para usted, no permita que lo molesten, ni tampoco usted los moleste a ellos, realice su vida en compañías pasajeras, no se aferre a las relaciones de amistad ni amorosas, ya que estas mas temprano que tarde acabaran, y esto le pasa a todo el mundo, pero los bipolares lo vivimos con mas intensidad, con la maldita culpa, pero de nuevo repetimos, deshágase pronto del sentimiento de culpa o pronto se vera sumergido en un sufrimiento incesante. Continuara………
