Es natural pero no creo que esté bien ir pegando a la gente.
Lo cierto es que el ser humano es un ser moral y racional a diferencia de otros animales, así que yo diría que cada uno obre según su forma de pensar, su moral, su conciencia y que se atañe a las consecuencias.
Yo nunca he tenido ganas de pegar a nadie salvo en una ocasión que mordí a mi madre en medio de un berrinche porque no me compró los dulces que me había prometido.
Siendo muy pequeña devolví el golpe que me habían dado previamente.
En otra ocasión siendo adolescente pegué como defensa ante una agresión física por parte de dos compañeras mías del colegio. Mi defensa fue patética, no conseguí meter ni un golpe, alguna patadita poco más.
El resto de veces que me han pegado (sobre todo familia) que por desgracia han sido bastantes nunca las he devuelto, se entiende que es parte de la riña al niño, de la educación que consideran los padres.