Hace un tiempo, leí un libro del psicólogo Bernardo Carducci que hacía una distinción entre
successfully shy y
unhappily shy. Según al autor del libro, un/a tímid@, siguiendo sus consejos, no dejaría de serlo, pero podría pasar de ser tímid@ infeliz a feliz. Éstas son las líneas generales de pensamiento que distinguirían un perfil del otro:
Pensamientos del/la tímid@ infeliz
• Me pongo nervios@ cuando estoy con gente porque sé que me están juzgando.
• No digo nada porque cuanto menos diga, menos me van a criticar.
• Quiero tener contacto con l@s demás, pero no tengo nada interesante que decir.
• Nadie más está nervios@. Yo soy el/la únic@ que es un fracaso en las fiestas y las reuniones.
• Toda la gente que me observa puede ver que me siento incómod@.
• Si se produce una pausa en una conversación, yo tengo la culpa.
• No se me da bien meterme en conversaciones ya empezadas. Cuando lo hago, todo el mundo se calla y me mira.
• Lo paso mal hablando con gente, por lo tanto soy un fracaso en todo.
• He estropeado conversaciones pasadas: debería haber dicho aquello, pero dije…
Pensamientos del/la tímid@ feliz
• Tengo cosas interesantes que contar, y la gente se dará cuenta.
• La mayoría de la gente es agradable, y no van a tener una imagen catastrófica de mí si me sonrojo, me quedo en blanco o no sé dar una respuesta inteligente en ese momento.
• No tengo que causarle una buena impresión a cada persona que me encuentre.
• Todo el mundo se pone nervioso a la hora de conocer gente o hablar en público.
• Puedo llegar a sentirme cómod@ en una situación incómod@.
• No me importa unirme a una conversación ya iniciada.
• Sé escuchar, y trato de no distraerme por síntomas físicos que puedan delatar mi timidez.
• Cuando les cuento a l@s demás que soy tímid@, me siento un poco más tranquil@.
• Una conversación normal está llena de silencios, pausas y reinicios.
• No puedo pretender tener feeling instantáneo con toda la gente. Si quiero conocer a alguien debo hacerle preguntas, proporcionarle información sobre mí mism@ y dar tiempo para que se desarrolle la relación.
• Si no hay buen rollo con alguien, no me obsesiono por ello. No le puedes caer bien a todo el mundo.
• Me preparo para nuevos encuentros proponiéndome metas alcanzables.
• Sigo mis sueños porque sé que son importantes para mi felicidad.
Personalmente, yo creo que tener los pensamientos del tímid@ feliz es ser bastante ingenu@. Ya sabemos que la sociedad no te va a tender la mano y que es especialmente discriminatoria con l@s FS, aunque tampoco quiero exluir la posibilidad de orientar mis pensamientos hacia direcciones un poco más positivas.
¿Cómo lo veis, en general?