Otro mito que derribar: más de una vez he leído o escuchado que personas con fobia social te hacen tener más empatía, son más comprensivas, no te juzgarán ni te rechazarán por nimiedades. Si bien hay casos donde sí se cumple esa regla, hay muchas otras excepciones que rebaten la premisa mencionada.
Y es que mucha gente con fobia social dice "el mundo no me entiende, la gente debería entendernos y ponerse en nuestro lugar, no deberían juzgarnos y deberían comprender nuestra situación". Sin embargo, alguna de esa gente es la misma que señala a personas anoréxicas, drogadictas, alcohólicas, obsesivas compulsivas, paranoides (a pesar de que en la mismísima fobia social hay algo de paranoia), suicidas, vírgenes, víctimas de bullying, etcétera. ¿Dónde queda su discurso de la empatía si ni siquiera son capaces de aplicarla con personas que tienen otros trastornos o problemas? Todas las personas hemos pecado alguna vez de juzgar sin conocer a alguien, es un hecho del que nadie se salva, así como hay personas que tienen más que ganados los juicios en su contra si sus actitudes afectan negativamente a otra gente; no obstante, es una mentira del porte de una catedral cuando dicen que una persona con fobia social -o cualquier otra persona que se exponga a juicios ignorantes en su contra- es siempre más empática que alguien que no pasa por el mismo proceso.
También es otra verdad como un templo que no se aplica la empatía en las mismas áreas, en unos casos cuesta más que en otros. Pero en mi ya no corta relación con gente fóbica social he aprendido que la regla general mencionada es una mentira. También están quienes repelen las críticas por ser personas raras, pero bien que juzgan a la gente que se divierte de manera normal solamente por esa razón.
Esa es mi reflexión del día.
