Yo tuve un desarollo de relación con el alcohol masomenos normal de asolescente, experimentando ciertas cuestiones, probando límites.
Cuando era más joven algunas veces de las que me quedaba sola en casa todo el día, me tomaba dos o tres vasos de vodka puro..
Pero ya en la actualidad he decidido que la mayoría sabe a mierda y odio los efectos que deja, así que solo tomo si me gusta el sabor del trago (normalmente me gustan los tragos dulces) y ya, no importa que tanta sea la presión social u otras cuestiones, si no me agrada, no.
Edit: También lo he usado mucho cuando necesito socializar conn urgencia, o hacer algo a lo que normalmente no me atrevería, no son muchos los casos, y me ha funcionado, no ha sido la mejor manera en todos los casos, por aquello de que se levantan las inhibiciones y a veces me he pasado un poco, pero nada grave y ha resultado bien para mi.