No sabría medir de cuantos grados seria el giro, ya que básicamente sigo siendo el mismo, pero con algunos cambios.
Salir, o ver multitudes de gente jamas me ha inspirado temor, lo que me atemorizaba era la cercanía emocional con alguien, temiendo el rechazo y el dolor que esto puede llevar, por lo que me aislaba voluntariamente de los demas... esto cambio, al menos en cuanto a una persona se refiere, a quien le agradezco inmensamente la paciencia que me ha tenido con mis inseguridades y enorme torpeza social.
Con el resto de la gente sigo prácticamente igual... pero eso es lo de menos para mi.