Esto es un cuento que todavía no termina, pero creo que está bastante interesante como para incluirlo acá.
Hola, que tal, yo soy Santiago y les vengo a contar, de la forma más breve, la historia de mi vida. ¿Por puro ego? Puede ser, quién sabe.
Ok, tengo conciencia, soy un niño, aproximadamente de unos 6 años. Muy tonto para su edad, no por ser tonto en sí, sino por no vivir, ya desde chiquito tenía esa mala costumbre de procrastinar, de esconderme de mis problemas y no enfrentarlos, algo que me persiguió durante toda mi vida; poco sociable, y feucho. Alto, delgado, bonita cara, pero con unas orejotas enormes. Paso toda mi infancia recibiendo insultos de "dumbo", "avioneta", etc. Es en serio.
Mi madre, una persona religiosas, de esas idiotas de las películas que no logran darse cuenta de cuándo hacen daño. Ella es maestra, una maestra excelente de hecho, es tan buena en su trabajo que cuando llega a casa se desquita con su hijo por todo lo que tuvo que soportar. No me golpea, simplemente pasa ignorándome, haciéndome sentir un inútil, culpándome por sus errores. Sé que me ama, pero estoy seguro de que no sabe hacerlo.
Mi padre está en la suya, no vive conmigo, es un drogadicto religioso más, que se come toda esa basura mística, junto con ese rock ochentero (que no es malo, pero según el, todo lo demás es mierda), que va por la vida creyendo que todo se soluciona con amor. No tiene empleo, no tiene ni siquiera una casa, cuando mi madre me trata mal, no tengo a quién recurrir. Y hasta mis 10 años no tuve hermanos (por parte de mi madre y un padrastro que me trataba como la mierda).
Ver como mi madre defendía a mi padrastro, no porque supiera que el tenía la razón, sino porque sabía que era más fácil domarme a mi que a el, y que era mejor "evitar problemas", duele.
Crezco sin amor, hoy en día alguien me da un abrazo y empiezo a temblar, es algo que no está en mi código. Soy alguien sensible, muy sensible, adoro la música, odio el maltrato animal, y siempre trato de ayudar a las personas, pero demostrar mis sentimientos para mi es casi, imposible.
Esto hace que en las relaciones sea alguien muy robótico, muy "dr. house" (sin lo bueno de dr. house).
La música es mi vida, los videojuegos también, me distraen (¿recuerdan mi costumbre de evadir problemas y de procrastinar? En mi adolescencia eso se intensificó al máximo). ¿Cosas buenas de mi? Soy alguien muy centrado, muy objetivo he inteligente (nunca caí en drogas o en el alcohol, sí que pensé un par de veces en el suicidio, pero en el fondo amo la vida).
En mi adolescencia me salen granitos, mi pelo lacio se me esponja, y a eso súmenle mis orejotas, mi delgadez y mi altura.
Soy alguien muy inteligente, pero muy poco sociable, no tengo la capacidad de demostrarle a otra persona que estoy interesado en su amistad, por ende, los únicos amigos que he tenido, son los que el destino puso ahí, y ahí se quedaron. No ser sociable hizo que pese a ser alguien inteligente, en la secundaria me vaya mal. Más regaños por parte de mi madre, un tormento. Me pasé toda mi adolescencia escuchando música, llorando, masturbándome y jugando videojuegos, leyéndo y durmiendo.
Mi madre se separó de su pareja, y ya vivo un poco más de paz. Tengo 2 hermanos que son, literalmente, los amores de mi vida (siento que me salvaron), un hermanito 10 años menor que yo, y una hermanita 12 años menor que yo con síndrome de down.
Toda mi vida fui un moralista, un critico un "¿Me pides que sea tolerante? ¿¡Qué hay de bueno en tolerar lo que está mal?!", un revolucionario, un pesado, un detallista al máximo. La lógica para mi lo era todo, cosa que siempre me ha hecho sentir un alien en un mundo que no es el mío. ¿Gente creyéndo en dioses sin prueba alguna? ¿Gente diciendo que la mejor música del mundo es el reggaeton? ¿Gente que basa su vida en el fútbol? No lo comprendía, y nunca lo comprendí.
Hablemos del ahora, hablemos de porqué este post está en el apartado de "superaciones".
Ser tan buena persona hizo que los pocos amigos que tuve, nunca me dejasen, soy alguien divertido, siempre que me invitan a salir salgo, sé cuidar a las personas, sé tratarlas (una vez les tomo confianza), y me considero una persona interesante. Las mujeres con las que hablo se les nota que se divierten hablando conmigo (¿será que al momento de hablar con alguien, me divierto sin tener prejuicios o pre ideas de "já, esto tiene tetas, intentaré ligármelo"? Es algo que siempre quise saber)
Con el tiempo he logrado superar mi intolerancia, aunque todavía no al 100%, cosa que me ha ayudado a no ver a las personas con tanto asco, y por consecuencia, a no sentirme tan solo, a sentirme una pieza más de este puzzle.
Nunca fui bueno en ningún deporte, pero el gimnasio me fascina, me relaja, me hace sentir que hago algo por mi mismo, y empecé a ir al gimnasio sin mayor motivo que el de hacer algo. Al día de hoy tengo un cuerpazo, y me gusto físicamente.
Como siempre fui alguien muuuuuuy orgulloso, para bien o para mal, nunca le pedí a mi madre nada, pero un día dije que me gustaría operarme las orejas (otoplastía), y mi madre muy de acuerdo me lo pagó (mi plan era pagármelo yo mismo cuando fuese mas grande y pudiese).
Hoy en día me siento "lindo", o alguien "normal", mínimo puedo caminar por la calle sin sentir que la gente me observa. Estudio medicina en una facultad privada (todo gracias a mi madre), y tengo 3 amiguillos que son pocos, y casi nunca nos vemos, pero son buenos amigos, y lo aprecio mucho.
Soy virgen, no he tenido novia, y tengo 20 años, la situación me carcome un poco la cabeza, pero me doy tiempo, siento que la vida me sonríe, y que aunque de forma muy muy lenta, ahora todo va para mejor.
Un saludo.
