Sí, suele pasar mucho. Y yo creo que no es más que fruto de que nos sentimos en centro de todo. Pensamos que allá donde estemos todo el mundo se va a fijar en nosotros, hacer comentarios. Aunque a veces pasa, nosotros siempre pensamos que es así.
Pero tienes que pensar una cosa. Tú no tienes la palabra "miedosa" grabada en la frente, así que la gente no sabe nada de tí.
Si entras a un bar lleno de borrachos, tú piensa lo mal que lo deben de estar pasando en sus vidas para tener que emborracharse, piensa que actúan así para ocultar su interior ( es malo pensar mal de los demás, pero oye, que funciona ), piensa que todo lo que digan y lo que hagan no lo hacen por ti, si no para disimular lo mal que están. Tú piensa que eres mejor que ellos.
Si el camarero empieza a hacerte la típica bromita, tú callada, y si te insiste y ves que puedes quedar ridícula en esa situación, le pides por favor que te atienda más rápido porque tienes prisa. Quizá quedarás algo borde, pero te sentirás bien por dentro. Mejor es eso a que te salgas del bar con ganas de llorar.
Otra forma de darte cuenta de que lo que te pasa no es para tanto es imaginarte que en vez de ser tú, fuera otra persona la que entrase al bar y le ocurriera lo mismo que a ti. ¿A caso ves que esa persona esté quedando en ridículo o ves que esa persona no le está dando importancia a la situación?
Recuerda, la fobia está en nuestra mente, sólo hay que saber domarla.
Espero que esto te sirva, a mi a veces sí que me ha servido.