Quizá lo que no existe es la amistad como la buscamos nosotros o como desearíamos que fuera. Hace unos días reflexionando en esas noches que el insomnio ataca pues me dije:
Vaya, que egoísta he sido todos estos años esperando que otra persona se ocupe o interese por mis problemas cuando yo no lo hago por mí misma como debería.
En resumen, se supone que la amistad debe ser compartir. Ahora, que nuestro compartir sea más complejo y con un nivel de exigencia superior donde se es necesario charlas largas filosóficas y no tan banales, entre otras cosas pues es muy distinto.
Personalmente ya no creo en nada, así que saca tu tus propias conclusiones.