Yo comparto lo último que escribi en mi diario:
No puedo dormir, no dejo de pensar en que me quedo atrás, todos avanzan y siguen con sus vidas; mi vida personal se estanca.
Hace 2 semanas fui a Guadalajara, necesitaba un respiro. Por fortuna ese viaje me dio fuerzas para levantarme de nuevo pero hoy otra vez me siento temblorosa y vacía.
En Guadalajara vi a un amigo, se llama Gil. Nos conocimos hace unos años, empezamos siendo ligues a la distancia, después amigos que se preguntaban como seríamos en persona. En Septiembre 2010 decidió viajar al DF a visitarme, fue divertido y por fortuna los 2 habíamos sido honestos, fue una buena experiencia.
Recuerdo que en esa semana que Gil estuvo en la ciudad, flirteamos todo el tiempo, la última noche que se quedó aquí mi mamá se había enojado mucho conmigo y me cerró la puerta, le llamé a Gil desconsolada y me fui a dormir a su hotel. Fue mágico porque dormimos juntos de una forma tan inocente; no se si es un recuerdo encubridor pero creo que me abrazó en la noche
. Jamás me he acostado con él, es algo que aún nos preguntamos como sería.
Esta vez que lo vi de nuevo reviví eso que sentía por él, me atrae mucho y me gusta que es la mezcla perfecta de ser terrenal, tranquilo, independiente y trabajador, además de que físicamente me gusta; pero él avanzó igual que todos y se que ahora es imposible, tiene una novia y una vida normal. Yo no tengo una vida normal, se que puedo ser un bicho que le chupe la energía porque estoy tan necesitada que lo absorberé todo en unos meses y después de nuevo estaré sola.
Volteo a mi alrededor y sólo veo vacío. No tengo esperanzas reales de encontrar a nadie, no soy una buena conversadora y no tengo la confianza para coquetear con nadie ni las ganas de desgastarme para quedarme sola al final. Tampoco creo que merezco encontrar un trabajo en donde me sienta feliz sin tener que fingir, no creo hacer nuevos amigos porque generalmente logro que la gente piense que soy rara y se aleje a los 5 minutos. Jamás me sentiré como en casa con mi familia ni dejaré de percibir los tonos de desprecio; aún me pasa que por tonta sigo abrazando a algunos para despedirme y no recibo nada de regreso, no se mueven sus brazos alrededor de mí… lo olvido y CADA VEZ QUE HAY REUNIONES ME PASA CON ALGUNO, me dolía tanto tanto al principio pero hoy se que es normal.
Se que seré la señora loca de los perros. Estoy completamente sola. Mi motor soy yo, pero las fuerzas se me acaban.