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La persona más adecuada para guiarte a la recuperación es probablemente un psicólogo.
De todos modos creo que lo mejor para quitarse el miedo o la vergüenza antes de llevar a cabo una acción es la práctica a solas. Puedes intentar aumentar poco a poco el volumen al que hablas leyendo un libro en un sitio donde nadie te escuche y te vas acostumbrando a la sensación.
Y cuando lo vayas a poner en práctica en un escenario real intenta dejar tu mente completamente en blanco y actuar por impulso, porque cuanto más lo pienses más pegas vas a encontrar, es contraproducente. Es dificil, sobretodo para personas con un autocontrol como el nuestro, pero no imposible.
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