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El mejor consejo que me han dado ha sido el de analizar mi propia mente. La traidora vive en casa, no fuera, no nos equivoquemos. Es agotador analizarlo, pero es eficiente si eres disciplinado. A mi me salvó el pellejo varias veces.
Luego está lo que yo llamo emociones pasivas y emociones activas. Hay que intentar crear emociones activas, sea alegría, ilusión, ira, o despecho. Cuando estás activo puedes hacer que las cosas cambien, pero cuando eres un hongo envuelto en la oscuridad de tus mantas se te va la vida en lágrimas.
Así que:
¡Música! Que es EL arte y puede mover hasta a las piedras
¡Deporte! Para ponerme en marcha, para ir bien estirada y con la cabeza bien alta por el mundo, eso siempre ayuda.
¡A leer! Porque leer da alas.
Y disciplina, porque nadie que no haya estado un poco dispuesto a sufrir trepando a escalado un monte.
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