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Felicidades!
Bueno, tu postura la veo bastante lógica. Llevas tanto tiempo esperando terminarla que te imaginas el final de mil maneras, pero al final, al menos en mi caso, fue como una liberación. Además, si le sumas a eso que no tienes algo con lo que rellenar las horas del día, pues es normal. A mí me pasaba en los finales de curso, que cuando terminaba el último examen me ponía a recoger los apuntes y guardarlos y me entraba un poco de bajón, pero ya se te pasará pronto.
En mi caso, no lo noté cuando terminé la carrera, porque estaba trabajando. Finalicé en septiembre y estuve todo el verano trabajando. Así que el paso fue más natural. Me quedaron 2 asignaturas para septiembre y las aprobé bien. Al día siguiente de enterarme que ya era licenciado volví a trabajar, así que el paso fue simple y no tuve ni tiempo para darle vueltas a la cabeza.
Eso sí, me sentí feliz (tras tantos años de esfuerzo) y liberado (por no tener que estudiar más esa carrera que me estaba saturando).
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Yo también me tomé un año medio sabático (porque hacía algún trabajillo de pocas horas para poder pagarme algún capricho), aunque luego sí que fue un ¿y ahora, qué?. Bueno, pues al final sí pude conseguir trabajo de lo mío, y eso que pensaba que no sería capaz. No pierdas la esperanza, y tómalo con calma
