Es una excelente oportunidad para superar tus miedos. Yo no conseguí viajar solo hasta hace poco tiempo (siempre hubo alguien). Un día decidí venirme a vivir a Madrid y no es tan fiero el león como lo pintan. Cuando uno tiene timidez excesiva es más difícil poder hablar con la gente que moverte por una ciudad desconocida. Casi le encuentras el gusto a perderte

. Por la cantidad de gente tampoco hay que preocuparse, te las apañas para buscar por donde no te las topes. Se trata de una prueba de supervivencia y ese instinto que todos tenemos (los tímidos lo guardamos por nuestra sobreprotección habitual) surge espontáneamente.
Por cierto, si te apetece puedes unirte a una quedada madrileña

. Yo meto la cuña, a ver si cuela

.