alma-solitaria, es cierto que ser rubio y de ojos claros trae sus dividendos. No obstante, el precio es caro, pues tienes que pasarte la vida defendiéndote de la envidia ajena. Aunque las personas no lo admitan abiertamente, te quieren mal porque, lógicamente, consideran injusto que tú tengas un físico más atractivo que el de ellas. Pocos entienden que el rubio no escogió ser rubio.
Francamente creo que es una pérdida de tiempo intentar cambiar cosas que "no se pueden cambiar". Créeme que es más práctico forjarse una personalidad; y a eso sí que nada lo supera, una personalidad pasa por encima de cualquier físico. Sin mencionar que la personalidad no envejece.
Saludos,
Daria Morgendorffer
"Es más que un deber moral decir lo que se piensa. Es un placer" -o.w.-