Gusanos

A mí eso no me causa problema.. por lo general si está algo lleno no me siento directamente -no me gusta la posibilidad de sentarme con un desconocido-, y si tengo que ceder el asiento a una persona mayor o que vaya más cargada que yo, lo hago inmediatamente y encantada, es un maldito asiento, qué relevancia tiene...
Respeto lo más que puedo a las personas mayores - son los humanos que más respeto, de lejos-, supongo que es algo subjetivo, según qué te inspiren o yo qué sé.
Lo que sí me es ultra difícil es ignorar a mendigos, vagabundos, o sin más gente que pide -o no- en la calle haciendo algo, sobre todo personas mayores, y más concretamente hombres. Tengo una hipersensibilidad hacia hombres de 50 y muchos o 60 para arriba, solitarios o como ya dije vagabundos o parecidos, me dan una lástima y una ternura absurda, por exagerada, y aunque me encantaría darles algo me da tremendísima vergüenza, soy incapaz.
últimamente veo uno concreto que es ¿mimo?, bastante mayor, con cara pintada de ..¿payaso? pero...triste, ..total, que hasta he llorado de lo que me ha inspirado y por ser tan cobarde y estúpida de no poder hacer lo que quiero, trato de pensar rápido en otra cosa, en lo malas que son las personas, "no te dejes engañar" jaja pero..
Me ha pasado en bastantes ocasiones ya, hace cerca de un año, viviendo en otro lugar miraba a veces a un hombre, que no pedía, pero era vagabundo, y me llegó tanto, me sentía tan impotente, verlo allí solo cada día, que un día llegué a casa y me puse a darle vueltas, quería darle los 50 euros que tenía en la cartera, llamé a una persona para contarle lo que pensaba y tal (recuerdo que hasta le dije que quería escribirle algo para decirle lo que sentía JAJAJ, qué vergüenza), que me aconsejara como dárselos -el hombre como he dicho no pedía-, y al final me persuadió, ("seguro que tiene problemas mentales", "seguro que es un borracho y se lo gasta en Don Simón", jaja, que con 50 euros no hacía nada, etc...)o simplemente cobardía.

Evoreth

Cuando he viajado en autobús, he solido ceder mi asiento a personas mayores, pero no sin antes experimentar la mortificación de tumultuosos latidos que me instaban a hacer lo contrario ante la tiranía de la timidez. Me costaba, mucho, pero era conocedora de que el sentimiento de malestar que me iba a producir no ser capaz de pronunciar mis intenciones iba a ser tal, que finalmente lograba vencer a la vergüenza y hacerlo. Sintiéndome, por ello, plenamente satisfecha.
Curioso eso que comentas, Gusanos. Siempre he solido fijarme en los mendigos, no podía ignorar su existencia, pero me daba vergüenza ofrecerles unas monedas que pudieran paliar su hambre, aunque lo deseaba con intensidad. Un día, me atreví a ello. La timidez se encargó de guiar el camino de mis ojos hacia el suelo y negar la existencia de una breve reciprocidad de miradas. Fue fugaz.
A partir de ese día, aunque la vergüenza sigue golpeándome con su aparición, simplemente lo hago.
Una vez, me quedé hablando con un grupo de indigentes y, al terminar la conversación, les dí varios euros. Recuerdo que uno de ellos sonrió y me dijo que estaba loca, que después de darles eso (sólo fueron unos pocos euros. Nada exorbitante), no les diera más nada en un tiempo. Grandiosa muestra de honradez.
Por desgracia, esas personas acostumbraban a estar altamente ebrias durante la mayor parte del día, por lo que las conversaciones estaban compuestas, en muchas ocasiones, de sin sentidos y si, se alargaban demasiado ( ya que tendían a retenerme por un rato largo) llegaban a incomodarme. No obstante, me alegré de haber llegado hasta ahí.
En una ocasión, conversé con un indigente que vive cerca de una gasolinera. Iba a lavar mi coche en una máquina por primera vez y, al verme algo perdida, se apresuró a darme explicaciones sobre su uso y quitó la antena del coche para que no lo hiciera yo.
Era una persona que estaba perfectamente sobria y fue interesante cruzar unas palabras con él. Parecía el típico viajero de mundo solitario. Según me relató, estaba esperando la llegada de un amigo para irse juntos a lejanas tierras. Llevaba años aguardando su regreso. Despertó en mí mucha ternura la historia del amigo leal, esperando durante años, paciente y esperanzado, a su compañero de viajes.

nayd

Gusanos y Evoreth, por lo que contais debeis ser personas bastante solidarias y con buen corazón.

Evoreth

Aunque he relatado esas experiencias por el placer de compartirlas y sin objeto alguno de recibir halagos, agradezco tu suposición.

wolfman

A mi la verdad tampoco me cuesta trabajo eso y lo hago.
aunque paso un poco de apuro porque mucha otra gente podria ceder el asiento y no lo hace y pensarà de mi: "mira que jodidamente educado y civico es el capuyo este"

pero son paranoias mias,que piensen lo que quieran...

Ale '88

Me pasa lo mismo, a veces me paro y espero que se siente, aunque me aseguro de que no se vaya a sentar otra persona que no lo necesite.

Gawain

A mi me daba miedo hacerlo inicialmente, pero ya no.

Aunque admito que a veces no lo hago por simple pereza o porque estoy indispuesto o algo xD.

E intento no discriminar en base a genero. El cederle el asiento a una mujer solo por ser mujer es tonto, se trata es de respeto hacia los mayores.

dadodebaja30719

Yo creo que lo ideal seria si la persona es vieja o esta embarazada tiene movilidad reducida en esos casos seguro. A mi me ocurre que las veces que tomo el colectivo resulta que siempre me topo con mujeres en la fila y por ser caballeroso tengo que dejarlas pasar a todas primero y termino subiendo último.

Palleiro

Yo no suelo coger el autobús urbano y las pocas veces que lo he cogido nunca me siento, siempre me quedo de pie, doy por hecho que alguien hay que lo necesite más que yo.

También cuando voy por la calle y veo a alguien mayor que lleva las bolsas de la compra y va muy cargado le ofrezco mi ayuda, recuerdo una vez en ponferrada que caían chuzos de punta y yo estaba en el rosal, un centro comercial, y había una señora que se le veía que no podía con las bolsas y menos aun llevar también un paraguas, así que la ayude, yo con las bolsas y ella con el paraguas, pues resulto que vivía a 40 minutos y cuando llegamos se empeño en darme un euro por las molestias, yo intente rechazárselo pero era testaruda como ninguna y acabe cogiéndoselo y de vuelta al centrocomercial, otros 40 minutos lloviendo y sin paraguas, menos mal que me gusta mojarme. la gente con la que estaba, cuando aparecí, se me quedaron mirando como si estuviera loco preguntándome que había estado haciendo durante una hora y pico para estar empapado de tal forma...

Respecto a los mendigos suelo darles algo, pero solo si me generan buenas sensaciones, siempre he creído que yo podría acabar siendo uno de ellos. Alguna vez cuando me he acercado han creido que les iva robar o hacer algo, cosa comprensible en su situación.

Tobbias

A mi me pasaba antes
ahora puedo hacerlo sin problemas, a madres embarazadas o ancianas agradables, y digo agradables porqe mas de una vez me habra pasado encontrarme con viejas de mierda que empujan y chillan todo el tiempo por la ventana o boludeces asi
viejas chotas.