Cita:
Iniciado por Nihilista
Como odio a los que se burlan del indefenso. Nos suelen repetir como loros los pseudoespecialistas que nuestros miedos suelen ser consecuencia de un comportamiento infantil, pero habrá que convenir que unirse unos cuantos para hacer mofa de otro es repetir ese mismo comportamiento infantil, en este caso en su versión de vulgares matones de instituto. Lo que escribes no parece propio de una empresa sino de un colegio repleto de niñatos imbéciles.
La peor opción es huir porque eso no te va a librar de que te vuelva a pasar, aunque tampoco hay que descartarlo si la situación se torna en insostenible. La gente se burla del solitario con miedo, pero les produce inquietud el solitario seguro de sí mismo. A veces un simple gesto adusto, de seriedad, de seguridad en uno mismo sirve para que le dejen en paz. También mostrar una sonrisa hacer ver que no te sientes incómodo estando alejado de la chusma.
Esto sería lo más realista de momento, no, por supuesto lo deseable. Lo deseable sería encararte, generar tensión y enfrentarte ante esa escoria. Yo recuerdo las humillaciones del colegio y del instituto. Nunca terminaron hasta que un día me encaré contra uno y le agarré del cuello en medio de la clase. Empecé a estrujar su pescuezo y él se iba poniendo rojo como un tomate no solamente porque no podía respirar sino porque le parecía increíble que fuera capaz de ser tan violento y delante de la profesora. Ese día que recordaré como de los más felices de mi existencia se terminó para siempre la historia de mi infamia particular. El fin justifica los medios, ¡vaya que si los justifica!
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¿Sabes? Creo que este usuario al que acabo de citar tiene toda la maldita razón. Volvamos a los tiempos bárbaros donde para mostrar nuestro punto había que poner el ejemplo con uno de la manada, que aprendan que ellos no saben nada de tí, y que puedes mostrar tu ferocidad cuando es necesario.
Pese a como lo expresé en un principio, no lo digo con sarcasmo, es la pura verdad.
Es lo que le enseñé a mi hermano y le funcionó, los únicos que pueden salvarte son tus puños. Hazte fuerte, aún si es un poco, entrena duro para poder dar al menos un golpe que libere toda esa ira en la cara de un sujeto (un golpe bien dado con su toque de ira pesa como si le dieras con un maldito ladrillo). Créeme que aunque te rompieras la mano (lo cual sería más que nada por dar mal el golpe) te sentirás mucho mejor, y ya no te hincharán los huevos. En serio.
Ya en el peor de los casos en el que te toparas con alguien que no te va a dejar en paz aún si usas la violencia, que sería por la combinación de resistencia física y falta de respeto al valor, o que sea un maldito cobarde que se escude en un grupito, si es uno que está hecho de acero solo acércate por detrás cuando nadie te vea y rómpele un palo o un trozo de concreto en un hombro (no en la cabeza, no queremos matarlo) o ya si lo pillas de frente y desprevenido en una rodilla, pero con fuerza, que se le vuelva la pierna del revés y que el tipo chille como un cerdo. Si es un cobarde que actúa respaldado por un grupo de matoncetes, solo localiza al líder y evalúa su fuerza (míralo, si participa como de hecho pasa mucho podrás saberlo sin problemas, sino simplemente es un debilucho o no quiere ensuciarse las manos, en ese caso es mejor andar con cuidado a menos que sea muy evidente), si crees que puedes vencerlo síguelo hasta que esten solo sutedes dos y desafíalo a una pelea uno a uno. Si huyeapunta a sus tobillos y dale tantas pedradas como puedas, hasta que una le de. Oblígalo a pelear. Si es más fuerte y no te deja en paz ve al paso del tipo resistente. Si es más débil hazle una llave de brazo y oblígalo a jurar que no lo hará de nuevo. Asegúrate de que le duela tanto que mee los pantalones y llore como un recién nacido. Rómpele unos cuantos dedos si amerita, y de cualquier forma jura que si esto trae represalias deberá estar siempre acompañado por sus gorilas, en casa o incluso en el baño, que duerma y cague a su lado, que sino en el momento menos pensado irás y le harás sufrir de las peores formas imaginables, rómpele otro dedo y dile "Esto <clack! dedo roto> no es NADA al lado de lo que puedo hacerte si sigues jodiendo". Un buen truco para romper dedos es moverlos hacia el lado en lugar de tirar atrás (la articulación se mueve hacia adelante). Separas la articulación rompiéndola desde la base, y según he escuchado... el dolor es horrible.
Nota: No hagas caso del párrafo anterior salvo en situaciones extremas (normalmente los golpes producto de un arduo entrenamiento bastan). Hay una pequeña posibilidad de que esto acarree represalias que incluso puedan llevar a la muerte, haz caso a ese párrafo solo si estás dispuesto a correr el riesgo, yo no me hago responsable.
Nota 2: Las tácticas mencionadas ace 2 párrafos y de las cuales advierte el párrafo anterior pueden llegar a considerarse cobardes, pero eso solo beneficia al enemigo. Es estrategia, muchacho, estrategia.