¿Quién eres? ¿Quién soy? ¿Cuánto valgo? ¿Quiénes somos?
Realmente la percepción de nosotros mismos no es la real, no somos nuestra mente, no somos lo que sentimos, no somos lo que nuestros padres nos dijeron, tampoco lo que nuestros amigos del colegio nos enseñaron, tampoco somos la suma de nuestros éxitos ni de nuestros fracasos, nadie puede medir ni valorar nuestra vida, no podemos valorarnos según esos parámetros, necesitamos referencias pero esas no son las adecuadas, porque los padres, los amigos, las personas se equivocan.
Crecimos pensando que nuestra vida era una mierda, que nosotros somos una mierda, pero en realidad es una mentira. Cada ser humano nace desnudo, vulnerable, expuesto a enfermedades y debilidades, unos viven de una forma más adaptativa que otra pero en el fondo todos somos iguales, cada uno con su talento descubierto o por descubrir, pero somos carne y hueso. Creímos que la gente se daría cuenta de la mierda que somos y evitamos las relaciones sociales o mostrarnos tal y como somos, pero en realidad no somos ninguna escoria, todos estamos hechos del mismo polvo, o mierda, o barro como quieras llamarlo, pero a su vez somos obras de arte, con un propósito y un sentido.
Con todo esto quiero decir que no confíes en el ser humano para medir tu valía, es difícil no hacerlo, pero debes encontrar la verdad de quien eres, te aseguro que la verdad no es que eres poca cosa, eres valios@, amad@ , y alguien dio su vida por ti, ese alguien es Jesús de Nazaret, el entregó su vida por ti para rescatarte y decirte “Te amo”. El quiere dar sentido a tu vida y un propósito por el cual vivir, amar a los demás, y tener una esperanza para toda la eternidad, no quiero convencer, pero creas o no creas, busca la verdad de quien eres, si buscas la verdad, pide a Dios si existe que te rebele quien eres realmente, si sabes quién eres, de dónde vienes y a dónde vas, lo demás viene por añadidura. ANIMO TU VALES MUXO.