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Iniciado por suerte28
No deberíamos dejar de ser como niños nunca. La mayoría de la gente adulta está superquemada y vive vidas postizas y nada espontáneas. Atrapados en un rol que se les ha impuesto de lo que se supone que se espera de ellos. Y enfrentados y compitiendo unos contra otros por un supuesto "premio social" que ni siquiera se sabe muy bien en qué consiste. No son ellos mismos en realidad. Son como hamsters en una rueda. Muchos de los que estamos aquí tenemos inadaptación social más por no querer pasar por esa "trampa social" que por otra cosa. Quizá es por eso que te has sentido identificado con esos niños, libres aún de todos esos condicionamientos.
Yo trabajo con adolescentes y aprendo cada día un montón de ellos, y tengo la oportunidad de comparar y darme cuenta de las cosas que pierde la gente a medida que cumple años. Pero no es por cumplir los años por lo que las pierden, sino por lo que nos malea la vida.
No tengo contacto con niños, pero estoy seguro de que si lo tuviera aprendería un montón de ellos también. Eso lo saben bien quienes hayáis sido padres. Te cambia la vida.
Ya sé que existen niños y adolescentes conflictivos, amargados e impertinentes pero si te fijas siempre siempre hay detrás una familia o entorno chungo que los ha amargado. Yo lo he visto siempre siempre así, ya que cuando he sido tutor he tratado con las familias y en cuanto conoces a los padres te das cuenta como todo encaja.
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Concuerdo completamente contigo. La verdad pienso que la infancia y la adolescencia son las mejores etapas de la vida por esos motivos, es ahí cuando en realidad somos seres humanos; cuando importa más una amistad verdadera y los pequeños placeres de la vida, que joderte al vecino en pos de obtener más ganancias. La verdad es que yo seré paranoico pero no un androide (quienes hayan escuchado el disco de Radihead: Paranoid Android entenderán la referencia), desde niño me prometí a mi mismo que no sería ese "adulto gruñón y autómata" que tanto repudiaba sino un "adulto buena onda y abierto", ahora entiendo que desde ese entonces tenía nociones de la existencia de esta trampa y quería evitarla a toda costa; tal vez por eso siento que tengo un retraso psicológico.
