Cambiar de hábitat natural, en pocas palabras, cambiar de un ambiente del cual estoy acostumbrado, me inquieta y me las ansias no me dejan dormir cuando eso pasa.
Recientemente tuve que cambiar de lugar de trabajo por un asunto de mi trabajo, soy muy tímido para interactuar con otras personas. El primer día tuve que explicar y hablar con una chica, digamos que lo hice mas o menos, soy muy malo para explicar pero creo que me entendió.
El segundo día igual, hablar con otra chica bla bla, aunque, realmente creía que me iría un poco mas difícil pero todo lo contrario, lo difícil se me ha hecho el trabajo que estoy realizando que no tengo ni para cuando terminarlo, de hecho, yo ni estoy capacitado para hacer lo que quieren ellos pero ni modo, quieren perder el tiempo conmigo pues que lo pierdan ja, a mi no me afecta.
Pero en conclusión, el enfrentar cosas nuevas siempre me da muchas ansias, siento una opresión en el pecho que no me deja ni dormir una vez que me despierto 2-3 horas antes de irme a trabajar. Ya cuando estoy rumbo al lugar de trabajo esa opresión se va como por arte de magia.
Lo único que logra tranquilizarme es sin duda la música, y que mejor que escuchar Pink Floyd para esos momentos, o Roger Waters, o David Gilmour, me tranquiliza, me pone a pensar en otras cosas.
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