Respuesta: El odio hacia la gente
 

Si ni siquiera tenemos control sobre nosotros mismos, ¿que nos podrá esperar en la vida?

Las emociones pueden ser muy difíciles de controlar, imposible incluso en ciertos casos extremos, pero lo que permite que una emoción negativa se arraigue es tu idiosincrasia.

Si enfocas tu consciencia únicamente en aquello que origina tu odio, entonces es más que natural que tal odio solo crecer más y más hasta que se vuelva un fin en si mismo.

Yo solía estar lleno de odio cuando era un adolescente pero llego un punto en que me canse y me auto cuestione hasta entender lo absurdo de eso. Hoy sigo siendo la misma persona, a la que le ocurrieron las mismas cosas y que experimento las mismas situaciones. Pero ya no siento ningún odio hacia nadie, ¿por que?, porque no vale la pena y al único al que dañaba era a mi mismo.

Parte de crecer es aprender a dejar de lado lo que te estorba.

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La sociedad no está para satisfacerte, y yo personalmente repudio más a un misántropo que a un alma cándida.

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No sé si se lo preguntas por sarcasmo, pero supongo que se referirá a que para curarnos del odio hay que sacrificar o eliminar humanos o gente.

Lo único, Vincedor, que ese método curativo no es muy rentable, ya que es muy temporal y cuando vuelva el odio, volverá con más fuerza que antes. Y desde la cárcel no creo que tengas más oportunidades de usar ese método curativo.

Creo que la mejor forma de retener el odio es pegando un golpe fuerte a la pared. De esta forma el dolor físico sustituirá el odio psíquico hasta que se te cure la mano.

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¿Ah si?, pues para mi no tiene sentido eso...

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¿Poder curativo? Las personas que viven llenas de odio envejecen antes y son mas propensas a sufrir un montón de enfermedades, cáncer incluido.

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Y así y todo no hay garantías de que desaparezca.

A continuación una explicación sobre lo que quiero decir al hablar del odio curativo.

Como a la mayoría de los que participamos en este foro, a lo largo de nuestra vida nos hemos encontrado con gente que nos ha hecho daño, frente a los cuales la mayoría albergamos algún tipo de resentimiento. Yo no soy una excepción.

Recuerdo que en determinados momentos, estando muy mal, pensé que si abandonaba y no continuaba luchando, todos esos malos ratos por los que me hicieron pasar quedarían sin, valga la expresión, vengar.

Fue ese deseo de revancha, de desquite, de observar como mis enemigos, aquellos que abusaron de mi cuando no podía defenderme, se dieran cuenta de que a pesar de todo había sobrevivido, y que pasados los años había logrado recuperarme y mejorar, lo que me motivó -junto con otras razones -en los momentos de acometer los avances mas importantes que llevé a cabo en mi vida.

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Para que odiarlos, es preferible ignorarlos supongo, si te sientes de esa manera.

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No me había puesto a pensar en eso. La verdad es que tiene mucha razón. Yo tambien odio a la gente y no habia pensado en el odio que siento hacia mi mismo. Porque yo mismo me tengo odio, asco y mucha culpa por los fracasos cometidos en mi vida. Me ha gustado tu comentario. Quiero reflexionar sobre eso, saludos.

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Totalmente de acuerdo. La mayoría de las personas vivimos queriendo aparentar ser buenos, y yo creo que la bondad no existe, que el altruismo no existe. Los bomberos no son bomberos porque realmente quieran ayudar a la gente, hay motivos más egoistas y de interés personal detrás que los sustentan, pero claro, queda más bonito, más "humano" decir que hacemos cosas buenas por ayudar a la gente. Hasta preocuparse por la gente que queremos es por interés puro y duro, y es que nos interesa tener contenta a esa persona por la que sentimos cierta dependencia emocional. No sé si seré misántropa, pero cada día me cuesta más ver la bondad en las personas... cada día me cuesta más actuar. Será verdad eso que dicen de que nuestras mierdas interiores las vemos reflejadas en todo aquello que nos rodea, como si la vida fuese un espejo.