Me he planteado la existencia desde una perspectiva 'inexistente', desde 'la nada' observando lo único que conozco (la existencia) sin que cualquier valor moral, es decir, mi memoria, incida sobre mi razonamiento.
¿Qué está bien? ¿Qué está mal? No existe ni el bien ni el mal, son solo productos de la vida. La vida tiene consciencia de sí misma, e inexplicablemente temen a lo que ellos denominan 'mal', es por eso que ella misma crea una serie de reglas que no estuvieron desde el principio de la existencia. Reglas que intentan regular el bien y el mal.
Nada más que la nada debería existir, la propia inexistencia es más razonable que la existencia. ¿Por qué existimos?
No tengo la respuesta.
A veces al escuchar al resto, veo inconformidad ante la vida. No oigo más que quejas y llantos, ¿cómo se atreve la gente a considerarse feliz? Si lo preguntas, te dirán que son felices (en su gran mayoría).
Si la vida es una mierda, ¿por qué hemos de vivirla? Y si la queremos vivir, no tenemos derecho a quejarnos ya que hemos aceptado todo lo que implica la vida.
Podría divagar más, pero creo que es suficiente.
Concluyo que, solamente existe una 'realidad' y no podemos cambiarla. Para nosotros solo existe lo que nos rodea, lo que antes llamé realidad. A ella tenemos acceso y a ninguna más.
Es por eso que tenemos que adaptarnos a lo que nos rodea y controlar lo máximo posible, y si no podemos, intentar manejar el curso hacia el mal mínimo.
Estas son las reglas del juego.
Como ejemplo puedo dar la gravedad, pero todo es un ejemplo. Todo es la causa de que todo sea así.
Si no existe el amor, la amistad, el bien, el mal, la felicidad, etc.
Da igual, realmente sí existen aunque lógicamente no deban existir. No queremos entender precisamente el por qué de esa existencia.
Son las reglas, así que hagamos amigos, enamorémonos, hagamos el bien, no tengamos miedo... seamos felices.
Luchemos por ser buenos jugadores.
Si hubiera un modo mejor de transmitir información que las palabras. Este mensaje nunca estará completo.
Espero que no me de por borrarlo , mis propios pensamientos personales suelen ser solo míos.