Educar en el no condicionamiento y en la libertad de pensamiento. Erradicar cualquier agente neurotizante y creador de contradicciones existenciales insalvables que se harán más patentes en la edad adulta, como la religión, moral absurda y enfermiza (ésto es bueno y ésto es malo), normas/convenciones sociales (hacer lo que se espera de ti, etc... ). Inculcar unos valores y una ética razonables basadas en el respeto, comprensión y empatía, y no en la competividad y ambición desmedidas, por ejemplo. En general, fomentar el criterio propio y el librepensamiento.
Educar en el conocimiento también lo veo imprescindible. No he marcado la opción de "educar en la inteligencia" porque cultura e inteligencia no es lo mismo. Además, lo que la naturaleza no te da, Salamanca no lo presta.
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