Desde que era niña, mi madre me enseñó a no creer en el físico de las personas, decía que finalmente el cuerpo es temporal, que tenía que estar muy atenta a las señales del cosmos porque cuando alguien en verdad te gusta, sientes algo extraño en la piel y hasta la sangre corre más rápido…
A esto le adjudico mi increíble don para estar con personas correctas a mi juicio.
Con este preludio ten en cuenta que me importará un carajo tu físico si hiciste que mi sangre recorriera mi ser como un Mercedes en la F1, también debes saber que seguro me encantarán cosas peculiares y extrañas de ti.
Amo el ancho de tu espalda que siempre me hace sentir reconfortada y protegida, esa que puedo abrazar sin razón o tener que hablar. Mencionaré la manera tan solemne en que duermes porque es fantástico ver que a pesar de estar dormido tienes cierta seriedad respetable y a la vez sexy.
Debes saber que por más moderna que sea nuestra sociedad yo aún soy una romántica que gusta de las cartas escritas a mano, que le regalen flores, que la tomen de la mano al caminar y sentarse en un columpio para mirar ¿hacia dónde? No importa si es contigo.
Soy de esas mujeres que aún necesita -al menos de manera íntima- ser tratada como “Princesa”…
Tú, el chico que quiero a mi lado, debes saber que he tenido tristezas y decepciones, que no siempre he sido encantadora y madura. Perdona si a veces aparento ser muy fuerte, segura o que puedo cuidarme sola… la realidad es que sí, sí puedo hacerlo, pero también me encanta cuando eres tú quien me cuida o desea cuidarme. Perdona las acciones varoniles que a veces tengo pero, por favor, no me trates como amiga.
Tú, el chico que quiero a mi lado, necesitas saber que me dolería mucho perderte, porque me haces feliz. Porque veo que podemos lograrlo, porque emocionalmente estoy ya muy unida a ti, no hay un mejor lugar para estar que contigo…
Porque no eres perfecto.
Porque me haces vibrar.
Estoy completamente consciente que somos dos seres que desean estar juntos pero individuales.
No hay nada que comprobar: tú me quieres, yo te quiero y compartimos los mismos valores.
Tú, el chico que quiero a mi lado… debes estar consiente que no es que sea indecente, sino que me gustas tanto que quiero tenerte en la cama todo el día, contigo quiero descubrir todo íntimamente -no es que no haya tenido una buena educación- sino que la desnudez es algo natural en mí…debes saber que entregarte mi cuerpo es entregar mi alma cada vez que estamos juntos, debes tener la seguridad que todo lo indecente, irrespetuoso y mal educado que se me ocurre… se me ocurre contigo y sólo contigo.
Y a pesar de mi personalidad, estoy un poquito chapada a la antigua y para mí el título sí importa.
Espero te sientas cómodo conmigo, seguro entre mis brazos, protegido por mis palabras, amado por mis piernas, enamorado por mi mente.
Yo también soy imperfecta.
Tú, el chico que quiero a mi lado, quiero decirte que me gusta saber que soy importante en tu vida aunque no precisamente indispensable, debes saber que no me haces sufrir, me haces aprender.
Espero día a día estés mejor, que tu mente sea mas sana, que no perdamos la fe, que quieras seguir caminando a mi lado, que el universo conspire a tu favor, que aprendas de esto igual o más que yo, que produzcas amor para todos y entre ellos esté yo.