Lo peor es ser "guapo" y que la gente se haga una imagen de tí que luego no correspondes.
Eso sí que es jodido, estar constantemente a la expectativa ajena, y decepcionar a ritmos instantáneos cada persona que vea en tí a alguien de valor.
Evidentemente si no eres agraciado ya de entrada causas una sensación de indiferencia, lo cual es mejor en nuestro caso ya que podemos pasar más desapercibidos. Así que no pasaría nada.
Por decirlo de otro modo: La caída es menos estrepitosa si la gente te sitúa a nivel del suelo que elevado a 100 metros sobre él.