Pido a los moderadores que por favor me aprueben este mensaje. No es algo crucial, pero sí medianamente importante para mí.
El trozo de historia que suscita esta pregunta tan extraña es breve.
Hace unos meses estuve ingresada en el hospital, me sometieron a una prueba y tuve que quedarme. Así que al día siguiente, cuando fueron a darme el alta, la doctora que había venido me confundió con una menor de edad y decía que debíamos esperar a mi madre, porque si no no podía darme el alta.
Voy a cumplir los 24.
Aunque en principio no le di mucha importancia, siempre he tenido un rostro aniñado, muchos conocerán ese mecanismo que empieza a darle vueltas a tonterías hasta que se transforman en algo de suma importancia.
Empecé a perguntarme si quizá no era sólo el rostro o mi estatura y complexión de apariencia frágil lo que contribuía a hacerme parecer 8 o 9 años más jóven.
Quizá era mi forma de comportarme la que impactaba de tal modo en la percepción de otros.
Soy retrasada social, si es que ese término acaso existe, quizá esta percepción de juventud viene de ese comportamiento esquivo que muestran muchas criaturas, escondidas tras la pierna de su adulto predilecto, pero con una mirada de curiosidad desbordante.
Quizá no tenga tanta culpa un rostro que dejó de desarrollarse a los 17, quedando algo desproporcionado, ni una complexión de delgadez extrema por la cual más d euna vez me han tachado de anoréxica.
Si mi hipótesis fuese cierta, a muchos por aquí les habrán hechado unos cuantos años menos de los que tienen.
No ha sido la única vez que al decir mi edad ha surgido un silencio extraño, debido al impacto de la información. Pero no me había dado cuenta.