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Yo creo que decepcioné principalmente a mi papá Q.E.P.D. cuando dejé la carrera de medicina, pero aún así se habrá hecho el fuerte para no demostrarlo y seguirme apoyando con mi nueva carrera. Mi mamá también un poquillo.
Y creo que es común pensar eso, sobre todo en el caso de que nuestros padres tengan ciertas expectativas de nosotros y que nos hayan demostrado su amor y apoyo. Eso ahora me da muchísima pena con mi mamá, fallar de nuevo en lo académico, porque desde que nací ha estado con sus hijos, apoyándonos, cuidándonos, alegrándose por nuestros triunfos y me daría una pena enorme decepcionarla de nuevo.
Y en cuanto a lo de matrimonio e hijos, pues... No creo que espere que los tenga porque ya le llevo mucho tiempo repitiendo que por ahora no me interesa eso... Quizás pasando los 30 me llame la atención. Nunca se sabe.
Creo que no decepcionarles también es una forma de motivarnos para salir adelante, y ese es el aspecto positivo que debemos de tomar de ello, no el negativo de dejarnos de caer cada vez que fallemos, porque caídas vendrán muchas pero hay que seguir y seguir, darnos tiempo cuando estemos cansados, agobiados o sin ánimos de seguir, pero después de ello a darle de nuevo.
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