Me ocurre, ¿para qué te voy a mentir? Eso sí, tampoco llego al punto de desearle desgracias a quienes tienen algo que yo no (a menos que se burle de mí o me presuma su situación), y más que darme rabia la felicidad ajena me da rabia mi propia situación. Sí, es cierto que hay que luchar, también es cierto que no quedarse mirando cómo son las cosas y empezar a tomar las riendas de la propia vida, pero no deja de dar rabia que algunas personas tengan más suerte que otras, porque así es en la mayoría de los casos.
En fin, igual ver a alguien en una buena situación me motiva en cierto modo a hacer cosas para llegar a tener una situación igual (o mejor) que la suya. Trato de tomarlo por ese lado.
|