Hay grados y tipos. Y la idea mas inteligente es juntarse con gente cuyos grados sean tan bajos que parezcan inexistentes tal y como se entiende que sospechas en las personas que mencionas, en vez de sospechar mentiras y comportamientos que no deberían de producirse. En vez de dejar que la suspicacia te haga pensar que son "falsos y mentirosos".
Además, puede que la "afección" determinante para acudir a este foro no sea un trastorno evitativo clásico, sino algún trastorno fóbico algo particular o un episodio traumático. Los trastornos psicológicos varían mucho según el desarrollo de cada persona; un fóbico social no tiene por necesidad que ser una seta muda y carente de iniciativa.
Puede que los grados altos de ansiedad no afloren en los primeros contactos sino a la hora de abrirse y exponerse a la crítica de la propia personalidad por parte del grupo. Puede que sean maestros curtidos en el arte de las mascaradas. Puede que se pongan hasta el culo de ansiolíticos. Pueden ser mil cosas. Pueden ser luchadores que a base de mucho trabajo han conseguido dominar ciertos miedos y han adquirido cierta soltura social.
Antes de juzgar, hay que hacer un esfuerzo por intentar ponerse en el pellejo de los demás. Es un ejercicio pesado que requiere práctica, pero que ayuda a ser mucho menos crítico con la gente y a trivializar ciertas actitudes que puedan observarse como "sospechosas".