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Iniciado por Kundera
Hola Kasumi, esto que dices es muy interesante. El caso es que los españoles siempre tienden a crear una especie de "gheto" allá a donde van. He vivido en varios lugares, y en todos he visto la msima situación: todo el mundo relacionándose entre ellos idependientemente del país de origen y un nucleo duro de españoles realizando una defensa numantina. Me ha ocurrido en más de una ocasión intercambiar cuatro palabras con alguno y que a los pocos días se enfaden, literalmente, por no sentarme con ellos. Oiga pues no, para eso me quedo en España.
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Es un comportamiento perfectamente natural y adaptado. Lo he visto aquí en España por parte de todo tipo de etnias y nacionalidades, concretamente colombianos. Es saludable y necesario compartir nuestras luchas diarias, quedar con un grupito y hablar de cuando vas a viajar a tu país de origen, de las trabas burocráticas, de cómo legalizar la situación, conseguir un trabajo o simplemente encontrar lo que nos interesa en la gran ciudad, ya sean restaurantes, fruterías, ferreterías o bares donde se junten personas de nuestro país.
El que a ti no te guste ese "rebañismo" es mas bien debido a tu problema de FS o de timidez pero no me dirás que en tierra extranjera (Berlin, Londres, Nueva York?) no es fuente de profunda satisfacción encontrar un puñado de españoles reunidos en torno a una mesa de pub, en el metro o esperando una cola del cine. A mi me ha pasado y eso sólo en una semanita de vacaciones... no me imagino la alegría que me daría viviendo un año entero en aquellas tierras de tinieblas.
Otra cosa es que seamos unos solitarios y a veces nos guste apartarnos del mundanal ruido de vez en cuando. Dependiendo de mi estado emocional, ha habido veces en que no me apetecía codearme con mis pares. Por ejemplo, este mes de diciembre en Berlin fui a Gesundbrunnen para internarme en el tour que propone la Asociación Berliner Unterwelten, un itinerario por uno de los múltiples refugios subterráneos que esconde la ciudad.
Pues bien, el tour era en lengua española, algo que agradezco profundamente. Y todos los que esperaban en la taquilla eran españoles. Sin embargo, como extranjero en tierra extraña no me sentí con ganas de compartir vivencias con ellos. Apenas les dirigí la palabra aunque me temo que se trata de una inercia, una pasividad resultado de mi costumbre de evitar la socialización.
Sin embargo, en el invierno del 2011 sí tuve la iniciativa de contactar con españoles en Nueva York, concretamente en el portaviones Intrepid. Depende de momentos y de estados internos más o menos expansivos. Sí es cierto, sin embargo, que los más introvertidos somos más independientes, más reacios a ese "borreguismo" y por ello más susceptibles de conocer a personas desde cero, independientemente de su lengua, raza o religión, sean indios, norteamericanos, alemanes, chinos o pakistaníes, eso sí, de uno en uno. xD