Ay, a mi la segunda parte de Pitch Black no me desagradó. Y es que son dos películas distintas y géneros distintos. Si la primera tira más al
survival horror, la segunda es puro
space opera. Y no me digas que la raza esa de los conquistadores no tiene detallitos originales, aunque solo sea por su gótico vestuario o el estrambótico diseño de sus naves.
O la crudeza de las invasiones, con esas naves que se clavaban en la superficie del planeta como puñales. Y esa persecución en ese planeta (Crematoria) que se asemejaba a Mercurio, ideal para mantener a los prisioneros de alta seguridad a buen recaudo. Esa película sólo me sugiere recuerdos agradables. Y reconozco que la he visto dos veces.
Además, el comienzo me recordó a un relato de ciencia ficción muy querido por mí: "El hombre en el laberinto" de Robert Silverberg, cuya lectura desde aquí recomiendo decididamente.
De la tercera película no puedo hablar porque no la he visto.
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A punto de contemplar (no se puede decir de otra manera) y disfrutar la segunda parte de "Cleopatra", con la única, irrepetible e inigualable Elizabeth Taylor.
Con un bol de aceitunas arbequina y una piña colada... ¡¡¡¡a disfrutar del peplum como sólo sabía hacerse en los años 60!!!! Joseph L. Mankiewicz como director, Richard Burton en el papel de Marco Antonio, Rex Harrison en el papel de Julio César... ¡Que más se puede pedir!