IronMaiden

Perdón, es que se me fue la olla y me equivoqué de hilo (era un pequeño desahogo relacionado con el tema suerte)
Pero ya que estoy......sobre la suerte (al igual que con la religión) creo que me declaro agnóstico, jeje. Creo más en el "Causa y efecto", pero; al igual que no puedo descartar la existencia de un ser o energía superior, no puedo descartar la idea de que exista algo, o sucedan cosas que escapen de la causalidad (sí que es un tema complicado :S)

Que estés bien tu también
Un saludo

Nishi

Yo creo que todo obedece a las leyes de la física. Las "Probabilidades" son calculadas a partir de la información limitada que tenemos en ese momento. No es que esté todo predestinado, pero todas las fuerzas que no hayan sido influidas directamente mediante decisiones de otros, junto con los factores ambientales (temperatura, presión del aire; masa, densidad, roce de objetos determinados, y un enorme etcétera) pueden predecir muchas cosas. La suerte no es más que el hecho de que una u otra probabilidad sea o no conveniente para una persona determinada. Al final muchas cosas que no requieran de las decisiones de otros (e incluso estas últimas si se sabe influenciar a la gente, sobornos, extorsión, en fin...) si son calculadas pueden llevar a la decisión correcta. El problema es que hay que hallar lo que se puede calcular en el tiempo en el que podemos obtener la información correcta. En el caso del lanzamiento de una moneda, depende de una persona cuyo dedo ejerce una fuerza variable dependiendo de cómo toma la moneda, el ritmo cardíaco, la respiración, y la intensidad del pulso enviado por el sistema nervioso al músculo del pulgar (a modo de ejemplo, lo puede tirar con el índice, o con la cabeza xD)... aunque dudo que alguien necesite calcular eso, así que se queda en probabilidades... aunque de todos modos estoy seguro de que todo eso se puede calcular de forma apropiada para predecir de qué lado caerá la moneda (aunque es muy robable que caiga en un ángulo agudo o recto, lo que provocará un rebote que requerirá nuevos cálculos basados en otros factores para el resultado final).

Creo que en todo hay posibilidades de cálculo, y creo que incluso las pulsaciones electroquímicas y con ello los pensamientos y emociones de una persona pueden ser predecidos con total precisión si se conoce por completo la estructura del cerebro. Está claro que no podemos hacer ese cálculo, y según muchas leyes no es posible hacer ese cálculo dada su complejidad, pero en teoría estoy seguro de que se puede calcular absolutamente todo, e incluso creo que se puede predecir con total certeza el futuro con ello (aunque es tan complicado que dudo que la humanidad logre en algún momento llevarlo a la práctica).

Ya pasando de mis locuras científicas voy a decir que la suerte es algo inventado, a todos nos puede pasar cualquier cosa, y aunque muchas cosas puedan calcularse no tenemos certeza de nada aún. Dado que no la tenemos debemos seguir adelante y hacer lo mejor que podamos. Lo digo como si lo fuera a hacer...

OM_RA

No he leído el libro que mencionas; no obstante, por como lo describes, me hizo rememorar cierto cuento titulado "Las ruinas circulares" de Jorge Luis Borges. Te dejo un enlace al cuento: http://goo.gl/RECTHh


Antes de creer en algo todos deberían preguntarse: ¿Existen pruebas empíricas de ello?

Creer en la suerte como un hado místico es mera superstición. La suerte es, por definición, la suma de aleatoriedades.

Séneca

Los diez mitos que Sheldrake analiza en El Espejismo de la Ciencia y que vale tener en cuenta a la hora de valorar lo que la ciencia materialista oficial nos dice y que me parece que subyace en el tema de esta discusión.

1. La naturaleza es mecánica – Se cree que todo es similar a una máquina, no a un organismo. “Somos robots ambulantes”, (dice Richard Dawkins) máquinas controladas por cerebros programados genéticamente. Una metáfora que ha dominado a la ciencia desde el siglo XVII.

2. La materia es inconsciente — Todo el universo está hecho de materia inconsciente que misteriosamente se vuelve consciente en el cerebro humano.

3. Las leyes de la naturaleza están fijas– Son igual hoy de lo que eran durante el Big Bang y lo serán para siempre. La vida evoluciona pero el substrato físico sobre el que lo hace es inmóvil.

4. La naturaleza no tiene propósito –Todo continua mecánicamente para siempre, sin una intención, siempre al azar.

5. El total de materia y energía siempre el mismo –La ley de la conservación de la materia (Sheldrake confiesa que nunca había pensado que esto podría ser de otra forma y sin embargo…)

6. La herencia biológica es material – Todo lo que heredamos es material, proviene de los genes o de modificaciones epigenética.

7. Las memorias están almacenadas como trazos materiales — Toda la memoria está almacenda en un lugar específico en el cerebro

8. La mente es el cerebro — Toda acción mental existe solo en el cerebro

9. La telepatía y los fenómenos paranormales son ilusorios –Ya que toda acción mental solo existe en el cerebro, las personas inteligentes saben que no es posible que una acción mental se transmita fuera del cerebro.

10. Solo la medicina mecanista funciona — Solo la medicina alópata, basada en la física y en la química conocida, funciona. Las terapias alternativas, la medicina homeopática y otros tratamientos de este estilo solamente son placebo.

nofuturo

Si alguna certeza tenemos es que venimos de la nada y que regresaremos a ella al cabo de un más o menos breve lapso de tiempo, mientras tanto somos una mezcolanza de nuestras decisiones y los zarandeos del azar. A veces las circunstancias se desenvuelven de manera insoportable y sufrimos en nuestro afán por encontrar sentido a sus caprichosos vaivenes, pero ya dicen por ahí que el que no se consuela es porque no quiere, ya que por muy bajo que caigamos, por muy cruel que haya sido la vida con nosotros, siempre habrá alguien a quien le haya ido peor.

moddius

Sin preámbulos me dispongo a contestar las 3 preguntas planteadas:


Dejando de lado las leyes del juego de azar, o falso azar, la suerte y el azar son conceptos de los que no tenemos control alguno. Mi parte romántica le gusta llamar destino.
La casualidad es otro concepto, no me gusta ligarlos juntos aunque se parezcan.

Por ejemplo; la familia dónde naces o el mismo país donde naces te determinaran. Eso es azar.
Si te toca una buena familia, buena en el sentido que querais darle, entonces tuviste suerte.

El azar y la suerte te determinaran ya sea en creencias religiosas, ética, esquema moral, sentido a la vida etc
Es muy difícil librarse de estas cadenas aún teniendo ayuda. Soy de la opinión que la suerte, el destino que te tocó librar, o que alguien/algo te dió (no entraremos en metafísica) son las cadenas de la Cueva de Platón.
Es la analogía perfecta para describir lo que pienso que es la suerte y el azar; o en otras palabras mas románticas el destino.

Y con esta parrafada ya te he respondido las otras dos preguntas

Sin entrar en porcentajes, demasiada.

Una parte ínfima, creo que ni siquiera controlamos esa ínfima parte, creemos controlarla.


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Por cierto, el resumen del libro “El mundo de Sofía” que hiciste….no es tal, ni se le acerca hehe, mm poniéndolo en pocas y llanas palabras es estudiar filosofía occidental desde la perspectiva de una adolescente (sin duda la mejor edad en la vida para empezar a filosofar) Sofía en trama novelesca mientras trata de descubrir el enigmático personaje que deja los sobres y disquetes con lo que estudiar.

Me lo recomendaron cuando iba al colegio hace ya muchos años y es de los pocos libros que no consigo terminar de carreterilla, en un fin de semana o una noche “larga” como las llamo yo.
Constantemente tengo que parar y digerir, y no me canso de leerlo.
Fue/es un superventas y está traducido a nada menos que 54 idiomas, para que veias el nivel hehe.

Disculpa por no pasarme a comentar antes, recién me di cuenta del hilo.
Abres temas y debates muy interesantes que sin duda no dejan indiferente a nadie; en algunos no compartimos la misma opinión pero de todos modos te respeto por dar tu opinión tal cual la piensas. Es algo raro y muy valioso hoy en día.

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