La verdad, no lo termine de ver. Me parece un acto terriblemente cruel, abusivo y despiadado, utilizar a un niño inocente, con un potencial enorme, para saciar nuestras propias debilidades humanas. Truncar el desarrollo intelectual de ese pobre, llenandole la cabeza de prejuicios y basura, debería de ser considerado un delito.
Cuando veo adultos, bailando y cantando, actuando como poseídos o celebrando con este tipo de tonterías, me hace mucha gracia, pero un niño, me causa mucha lastima, porque es una victima del adoctrinamiento al que es sometido.
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