Hoy no he tenido clase, estuvimos esperando al profesor pero finalmente no llegó. Durante la espera todos mis compañeros hablaban entre ellos animosamente y despreocupados (ya se conocen de otros años y yo soy nueva en clase), mientras yo me decía mentalmente toda clase de pensamientos positivos del tipo “ lo estás haciendo muy bien, te estás enfrentando a lo que te da miedo” “tú tranquila, sólo sé tú misma, igual que tus compañeros”, trataba de concentrarme en la lectura de los apuntes del día anterior, jugaba con el móvil, en fin todo para estar lo más tranquila posible y superando el temor a estar rodeada de tantísimas personas.
Entonces se me acercó un chico alemán que ya me había hablado el primer día de clase para preguntarme si tenía acceso a la página web de la asignatura. Estaba bastante nerviosa pero trataba de centrarme en lo que me decía y olvidar los síntomas de no poder tragar y sobre todo la sensación de que te falta el aire, de ahogo. No paraba de repetirme “muy bien hecho, esto es un entrenamiento para el futuro y para superar este problema, se lo más amable posible, es normal estar nerviosa porque estás enfrentando tu miedo, no hay ningún peligro, todo está bien”.
La conversación fue fenomenal, salimos de la facultad juntos y nos dirigimos hacia la estación de tren, de modo que la charla duró unos 20 minutos. Una vez que me despedí de él me sentía volando entre las nubes, profundamente satisfecha de cada pequeño avance aunque un poco cansada por la tensión. Todo fue estupendamente, es un chico sumamente respetuoso y amable, me ha reconfortado mucho conocerle y me siento muy contenta.
Estaba motivada, de modo que decidí acercarme a la biblioteca y preguntar por el sistema de préstamos de ordenadores portátiles. A otro caballero le pregunté por manuales de informática y de vuelta a casa en coche pasé por una tienda para preguntar si tenían un producto que quería comprar.
He estado nerviosa pero es señal de que estoy luchando y superando, así que me siento profundamente feliz porque he tomado la iniciativa y todo ha ido bien.
Otro día más y mejor. Todos los días voy a ponerme pequeños retos, iré tomando confianza como hoy y si sale mal no pasa nada porque llegará un día en el que el miedo desaparezca por completo. Aunque no tenga ganas, cumpliré mis retos diarios y me expondré cada día más.
¿Soléis tomar la iniciativa? ¿os proponéis retos diarios?
Mis mejores deseos para todos.