Yo puedo contestar pues no me causa problemas, pero si es algo como la universidad la que me llama ahí sí me pongo muy nerviosa.
Ahora si me toca llamar esa es mi tortura, me da taquicardia mientras pienso y re pienso si llamo o no, luego me pongo super roja cuando me contestan y peor cuando no me entienden lo que les digo
me pongo muy ansiosa con algo que no tenía previsto que me preguntaran y si olvide preguntar algo y me toca volver a llamar ya está que me muero de vergüenza. <- Para mi es lo mismo que ir a un almacén o restaurante o supermercado y tener que preguntarle algo a un extraño, sufro los mismos síntomas.