La presidenta Cristina Kirchner afirmó ante el Comité de Descolonización de las Naciones Unidas que la solución al conflicto por la soberanía de las Islas Malvinas es un desafío a los organismos multilaterales y a todas las naciones, pues permitirá dejar definitivamente atrás el colonialismo y construir el nuevo mundo que todos merecemos". “Lo único que pretendemos –definió- es dejar atrás esta historia de colonialismo anacrónico y construir una nueva historia en base al diálogo” y se preguntó si “puede alguien en el mundo contemporáneo negarse a dialogar y luego querer convertirse en adalid de los derechos humanos de las libertades del mundo civilizado, occidental y cristiano”.
La Presidenta dijo que “la Argentina está abierta a la negociación” con Gran Bretaña, que de tener un buen cauce permitirá “que ambos países destraben muchas cosas, y permitirá asociaciones beneficiosas para el conjunto de América del Sur y para el Mundo”.
“Detenernos en las Malvinas sólo como cuestión bilateral territorial de soberanía –sostuvo Cristina Kirchner- es achicar el caso, que es un desafío a nosotros mismos, a los organismos multilaterales, a los Gobiernos, para que sean capaces de superar los prejuicios, los ‘cliches’ de lo que ya no es, que ya no volverá a ser, porque el mundo ha cambiado y hay nuevos protagonistas”.
La Primera Mandataria también advirtió que el mundo actual “tiene muchos problemas porque los organismos multilaterales como las Naciones Unidas, y esto no es culpa de las Naciones Unidas, tienen diferentes estándares: si uno es miembro permanente del Consejo de Seguridad, puede respetar o no respetar una resolución de la ONU, pero si uno no es miembro de ese Consejo y si no respeta alguna resolución o viola los derechos humanos en países sin petróleo, no pasa nada” porque sólo hay reclamos cuando esas violaciones se producen en naciones “con petróleo”.
Afirmó que “el hecho de que el Reino Unido no respete la resolución de la ONU va más allá de una cuestión bilateral con la Argentina, afecta también al orden global, a la posibilidad de tener un mundo más justo, más equitativo , más igualitario, un mundo que está cambiando” por lo que estimó que cuestiones como la de Malvinas “van a ser resueltas más temprano que tarde porque es necesario recuperar no solamente la cordura, sino los instrumentos que nos permitan vivir en un orden civilizado en el que cada uno sepa a qué atenerse”.
|