¡Cómo se resuelven las cosas cuando se sale a caminar! Toman forma, sentido, significado, y de ahí se reducen, se dejan en sus últimas disyuntivas, se tornan claras.
Por ahora, entonces, queda el dilema, ¡el dilema último! Libertad y seguridad, seguridad y libertad.
¿Qué hacer?