El ser humano, como cualquier otro ser vivo, solo ansía su propio bienestar. Este "instinto" llevado al extremo se convierte en avaricia: Cuanto más tengo, mejor para mi.
En el reino animal quien más tiene es el más fuerte, ya que impone su fuerza física para someter a los demás. En el ser humano la fuerza física ha sido sustituida por la inteligencia: El más listo es el que más tiene.
Por lo tanto, quien está arriba del todo, ansía que los demás sean más tontos, para poder ser engañados y sometidos más fácilmente. Antiguamente el instrumento fue la religión, pues el miedo es uno de los métodos de dominación y sumisión más poderosos que hay, y actualmente ese miedo se ha refinado hasta tal extremo que la gente vive con miedo, sin saberlo. Vivís en una sociedad del miedo... miedo a perder tu casa, tu coche, tu trabajo, tus insignificantes cosas materiales que te han incitado a tener.
Quien está en el poder utiliza el miedo para someteros: Miedo a las crisis que ellos se inventan en las que podrías perderlo todo, miedo a otras opciones políticas que podrían traerte aun más miseria de la que tienes.
El secreto está en darte cuenta de que vives con miedo, de que actúas tal y como ellos quieren porque tienes miedo a perder lo poco que te queda. Y todo ello aderezado con unas buenas dosis de "opio": Futbol, televisión, smartphones,... cosas que te distraen y te mantienen tranquilo.
Solo tienes que ver que a la gente le importa más si un penalti ha sido mal pitado que el que 10.000 personas mueran de hambre cada hora... solo te importa tu miedo, tu mundo, tu droga.
Desgraciadamente el ser humano es un ser sumiso, se acostumbra enseguida a ser sometido. Alcanza un extraño bienestar subyugado en una sociedad corrupta, y aunque pueda llegar a ser consciente de ello, no le importa, pues haya cierto confort en su pequeña "celda". ¿Para qué me voy a molestar si ya tengo mi comida rápida, mi coche, futbol y un poco de dinero para pagar mis caprichos?... mejor no hacer nada, no vaya a ser que pierda eso poco que tengo.