El otro día me di cuenta de algo que creo que es importante.
Creo que el problema que tenemos los que entramos en esta web es, básicamente, que no somos capaces de aceptar el lado malo que todo ser humano lleva dentro. Es como si dentro de nosotros se librase una batalla constante entre nuestro lado bueno y sensible, contra nuestro lado malo y cruel. Y lo peor de todo, es que creo que es el lado malo el que va ganando por ahora.
Creo que cada vez que dejamos de hacer algo, cada vez que dejamos de salir, cada vez que dejamos de hablar con alguien, estamos dándole un poco más de fuerza a nuestro lado malo. De alguna manera estamos dándole la razón: somos malos y no nos merecemos nada. Nada de nada. También me di cuenta de otra cosa: este lado malo es totalmente auto-destructivo. Si por él fuera, nos destruiría por completo. Destruiría el cuerpo en el que vive y no dejaría nada de él. De ahí que a ese lado oscuro de nosotros mismos jamás se le ocurra que hagamos deporte o que hagamos algo bueno para nosotros mismos.
Creo que cuando no podemos mirar a alguien a los ojos, es porque tenemos miedo de que nuestra mirada muestre ese lado malo y cruel que llevamos dentro. Cuando nos ponemos rojos, cuando nos da verguenza cualquier cosa: siempre es por lo mismo. Nos da miedo que los demás detecten nuestra maldad.
Yo lo veo casi como maldad en estado puro, una maldad que vive dentro de nosotros y que se va haciendo cada vez más fuerte. Me he dado cuenta de que ultimamente ni siquiera era capaz de ver una película de risa, o de leer un libro sobre algún tema estúpido a priori...siempre buscaba películas con algún argumento "oscuro" o retorcido, con personajes atormentados o perdedores...y lo mismo con los libros y con todo. Es como si ese lado malo que tengo dentro me quisiera arrastrar hacia su mundo de oscuriad y odio hacia mí mismo y hacia todo lo que me rodea.
Entonces, qué podemos hacer? fácil: lo contrario de lo que ese lado malo quiere: salir a la calle, respirar aire puro, ver los árboles mecerse por el viento, hablar con todo el mundo, cuidar nuestro cuerpo...hacer deporte, ver y leer cosas más "normales"...en definitiva: VIVIR y dar la espalda a ese mundo de oscuridad que habita en nuestro interior.
Quizás me toméis por loco cuando leáis ésto que acabo de escribir, pero os juro que yo casi puedo tocar esa parte oscura, ese lado malvado que intenta destruir mi vida. Tengo que luchar contra él.
Un abrazo a todos.