Yo creo que ser mujer tiene sus ventajas. Si yo hubiera nacido mujer me hubiese conseguido un buen marido, enamorado de mí y con excelentes ingresos, y hubiese pasado el resto de mi vida en casa, mirando novelas y jugando con mis hijos. ¿Qué mejor que eso? Lo único malo es el momento del parto, pero la posibilidad de tener orgamos múltiples lo compensa, creo.