Yo creo que sí. Para mí tener alta la autoestima significa tener una visión realista de mí misma, sin querer esconder los propios defectos, porque a pesar de que no me gusten, quiero ser plenamente consciente de que tampoco puedo ser perfecta y no me es necesario para ser feliz. Tengo derecho a ser como soy.
Esto implicaría dejar de tener miedo a mostrarme tal como soy. Y por mucho que me fastidiara ponerme a temblar, ruborizarme, tartamudear..., esto no sería suficiente motivo para quedarme encerrada en casa y rechazarme a mí misma.
Aprendería a ser más tolerante con mis defectos, cosa que no significa resignarme. Tendría un plan para cambiar aquello que no me gusta de mi personalidad, sin tener mis metas como vitales e imprescindibles para ser feliz. Serían sólo objetivos que si no llegara a alcanzarlos tampoco importaría para mi bienestar. Ya no tendría que esperar a ser más guapa, lista, sociable... para salir de casa y relacionarme con los demás.
El día que lo consiga...sonarán las campanas, jajajajaaa
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