A menos que sea un LAN party o alguna frikeada por el estilo
, detestaría que me inviten a una discoteca o una fiesta como las que suelen hacer mis contemporáneos (no fumo, no tomo, no me drogo, no me gusta la música que ponen, detesto a la gente que suele ir a esos lugares, entonces, ¿para qué carajos voy a ir?
); por suerte, a excepción de un par de veces nunca me han invitado a aquellos lugares.
Cierta vez en un trabajo que tuve pretendieron invitarme a una fiesta en la casa de alguien, no pensaba ir. Para colmo de males, les oía decir en secreto que lo que realmente querían era emborracharme para burlarse y fastidiarme de alguna manera en la susodicha juerga.
En otra oportunidad, un compañero con el que ocasionalmente conversaba estaba invitando gente para una discoteca (si no me equivoco se celebraba la fiesta de fin de año). Yo puse mi cara más amarga posible para que ni se le ocurra invitarme, y él me dijo: "A ti no te gustan las discotecas, ¿verdad?... Tú eres medio apático". Aunque no sé si considerarme alguien apático, ¡qué alivio sentí cuando exclamó aquellas palabras!