cabecita

si lo he hecho

santiagoo

Este post es muy interesante, porque la humillacion se presenta de muchas maneras, no necesariamente es que alguien se ria de ti en tu cara por ser timido, no, mas bien se refiere a la humillacion (por mencionar un ejemplo) de que te tengan que mantener tus padres porque no puedes trabajar debido a tu fs, o que si trabajas tengas que hacer tareas de limpieza o en un almacen apartado (donde estas solo) o por ejemplo que tengas que trabajar de velador toda la noche, es humillante porque uno quisiera trabajar conviviendo con la gente (al menos yo si desearia estar en un trabajo muy sociable), ademas esos trabajos aislados pagan poco dinero y todos queremos ganar buen dinero (no seamos hipocritas).

Termino diciendo que tener fs es ya una gran humillacion.

Anonimo

Yo creo que lo que nos hace falta es precisamente el carácter para defender nuestros principios, como ya mencionaron más arriba. En mi caso, siempre que estoy en la posición de defender mi punto de vista, algo en mí me dice que esos puntos de vista son ridículos o que no tengo el derecho a defenderlos ante los demás; que me vería ridículo.
Supongo que en el fondo lo que se tendría que hacer es enfrentar el miedo al ridículo y defender nuestros puntos de vista por tontos que pensemos que les puedan parecer a los demás o incluso a nosotros mismos.

Anonimo

Yo lo he hecho y en parte sigo haciéndolo, pero la verdad es que es imposible para mí conseguir algo de otra forma así que o acepto como soy y renuncio a mí orgullo o tratod e cambiar y veo que no puedo

Anonimo

Yo de adolescente no quería estar sólo. Así que renuncié a mis principios, haciendo cosas que no quería hacer y llegando hasta a decir cosas que no quería decir. A mis 19 años entendí que cuando haces algo que no quieres hacer, la mayor parte de las veces que lo haces, haces el estúpido. Así que abandoné toda mi vida social porque me hacía daño. Mientras tanto no conocía a gente nueva. Ahora tampoco.

Anonimo

Eso se ha hecho siempre y se sigue haciendo hoy en día. Con más derechos y opciones, pero a fin de cuentas humillándose con tal de subsistir y tener seguridad. No es algo de fóbicos sociales sino de personas de todo tipo. En ello se basan los Estados.