Pájaro sin nido

Quedáis advertidos de que este post es de contenido melancólico y auto-discriminatorio. Y posiblemente al final os daré pena o asco (o indiferencia), o ambas cosas.
Pasen y tomen asiento.

1992: Nazco en Madrid. Tengo testículos, dos hermanos mayores, padres que superan los cuarenta años de edad (y casi los cincuenta), y fobia a los ruidos fuertes y repentinos, que adquirí, al parecer, estando aún en el vientre de mi madre.

1993: Aprendo a hablar y a andar prematuramente. Mis padres se dan cuenta de que me pasa algo con los ruidos. Nace mi hermanita pequeña.

1994: No puedo ir a la guardería por enfermedad (cada vez que iba volvía enfermo). Al parecer, según cuentan, yo era un niño muy mono.

1995-1998: Estudio preescolar. A los niños solían darnos globos para jugar en los recreos. Yo me apartaba a una esquina y lloraba. La psicóloga del centro aventuró que se me pasaría con la edad (fail). Mientras, seguían exponiéndome. En el 98 empecé primaria.

1998-2004: Aquí comienza la que sería la época más feliz de mi vida. En primaria ya no repartían globos. Era el “líder” de mi grupo de amigos, quienes siempre me seguían y hacían caso. Era el mejor jugando al pilla-pilla. Los profesores me elogiaban continuamente por mi inteligencia. Ganaba todos los años el concurso de dibujo del colegio (cosa que no disfrutaba, porque era siempre en Navidad, y en Navidad tiraban petardos), y mi hermana mayor se llevaba mis dibujos para enseñárselos a sus compañeros de universidad. Cuando tenía diez años me escogieron para representar al colegio en un concurso de matemáticas en la universidad.

Con todo, ya intuía una diferencia entre mis amigos y yo. A mi mis padres me habían educado de otra manera; solo contemplarles ya suponía otra educación. A mi padre no le gustaba el futbol, ni la religión, ni ningún fenómeno de masas; le gustaba leer, los misterios, la historias. Consecuencias: cuando me apuntaron a catequesis no dejaba de molestar y de burlarme, y no hacían más que llamarme la atención. Al final renuncié durante el segundo año de catequesis, sacrificando mi comunión y los montones de regalos que me iban a hacer con ella.

2004: Comienzo secundaria. Mis compañeros están cambiando, y yo también, pero de manera diferente, es un cambio doble. Me aburro con ellos, les sigo el rollo para seguir siendo su amigo, pero cada vez sueño más y contemplo menos mí alrededor (en parte la culpa la tiene Harry Potter (ese gafotas carapartida), que mi padre me compró años antes para que empezara a leer, y que me envició más de la cuenta). Tenía doce años. Cada vez bajaba menos a la calle a jugar con mis amigos. Uno de ellos murió cuando se cayó (o se tiró) desde un octavo piso. Dejé de querer ser biólogo para querer ser escritor.

2005: Una noche vieja en casa de mis tíos, petardos que hacían temblar los cristales, una vivienda pequeña donde no poder esconderme. Ese día lloré, cené en el suelo, no comí doce uvas, estuve horas y horas acurrucado, temblando en un rincón. En algún momento de ese día decidí que no quería seguir vivo.

En esta ocasión el 13 fue mi número maldito, como para los templarios allá por los tiempos de los romances. Con trece años caí en las manos del miedo, en la inseguridad, en el desapasionamiento. Los pasé planeando mi suicidio, que debía ser antes de las navidades siguientes, distanciándome cada vez más y más de mis amigos (total, para qué los quería, si iba a morir…), distanciándome de todo. Dejé de pensar en el futuro, dejé de pensar en mis deberes, dejé de pensar en todo lo que no fuera yo y mi miedo.

No tuve el valor.

2006: Ya no tenía ningún amigo… Tiene gracia (o más bien no), pero mi mejor amigo era Harry Potter, o así lo percibía mi mente atolondrada. Leí el primer libro 16 veces, el segundo 14, el tercero 13, el cuarto 10, el quinto 5, el sexto 3 y el séptimo 1. Y seguí soñando y planeando mi muerte.

2007-2009: Más de lo mismo. Leí, jugué a la play, descubrí el internet y me hundí en mí mismo. A veces conseguía hacer algún amigo con quien pasaba un tiempo antes de volver a quedarme solo. Olvidé definitivamente cómo hablar y cómo ser sociable. Vi pasar los días, los meses y los años desde mi habitación, sin saber resolver el laberinto que me sacaría de aquella situación lamentable. Sintiendo como cuchillas de afeitar contra la piel cada momento que debió ser y no fue, cada experiencia que debí vivir y no viví. Incluso mi vieja ambición de ser escritor languideció y se perdió en las brumas. Las historias quedaron incompletas, y aún hoy sus personajes sobreviven en mi memoria, paralizados, esperando a que vuelva a cimentar sus destinos.

2010: Mayor de edad, sin haber besado los labios de una mujer, sin nadie que me abrazara en las horas frías. Yo, solo en la noche, empecé a adorar a la Luna, pues creía que del Sol ya solo me quedaba aspirar a su reflejo. Ya no hablaba con nadie -solo por internet-, ni siquiera con mi familia. Mi familia. Mi propia familia, quien había sido tan buena como para brindarme una vida bastante cómoda, pero no lo suficientemente cercana como para protegerme de mi mismo, ahora también estaba fuera de mis expectativas.

Al menos ya hacía tiempo que había comprendido que yo no iba a suicidarme, ni a morir tan pronto como creía. Tendría que afrontar la vida un poco más, es lo que conlleva el mal de la esperanza. Mi futuro profesional era un enigma a resolver ahora, y después de un bachillerato tan vacio y rutinario como el resto de mi vida en el instituto decidí estudiar un grado de Historia del Arte. Realicé la prueba de selectividad, aprobé estudiando desde un par de días antes, como siempre he hecho, y realicé los trámites necesarios. Me aburrí de la universidad el primer día.

2011: ¿Soy un traidor a mis propias expectativas? No soy capaz de estudiar más de unas ocho horas por asignatura en los exámenes. No soy capaz de esforzarme lo más mínimo: he suspendido 6 asignaturas de 10. Me da igual todo y me he vuelto un imbécil. Hace más de dos años que no mantengo una conversación fluida en persona. Hace más de uno que no tengo amigos ni siquiera en internet. Cada vez que alguien da señales de haber leído lo que he escrito en un foro u otro me ilusiono como un enano.

Puedo quedar de vez en cuando para tratar de hacer algo divertido.

Puedo embargarme de cultura y ocio en el profundo océano de internet.

Puedo disfrutar haciendo estas cosas, pero siempre hay un vacio rodeando a mi persona que envuelve de espinas mi corazón. No soy feliz esperando eternamente sin esperanza a esa dama celta que me enseñaron a idolatrar los libros y que cobró forma en cada retazo de mi imaginación. No soy feliz anhelando desde mi cárcel de cuatro paredes un millar de aventuras que hagan a esta vida digna de ser el centro de mi ser. Ni siquiera soy feliz intentando hacer cosas nuevas, intentando escuchar los consejos de un psicólogo desmerecido que me instan a avanzar a un cambio que no es cambio, porque ya lo he vivido y resulta en fracaso, una y otra vez. Y aún así…

… aún así sigo aquí, sin derramar lagrimas, sin arrastrarme por el suelo. Tal vez la felicidad no me guarde un sitio en su harén, tal vez esté abocado a un averno en vida. Pero por mi pasado, por aquel niño que quería estar muerto con trece años, me prometo a mi mismo que no voy a sucumbir a la tristeza ni a la depresión si ello está en mi mano. Yo NO ME LO MEREZCO. Si me acosan más males, me haré más fuerte. Hasta que alguien caiga.


Gracias por leer (ahora sabéis demasiado, tendré que mataros xD). Buscaba más que consejo desahogo, pero si queréis aceptaré vuestros consejos igualmente.

dadodebaja22612

Esta bien que necesites desahogarte todos lo necesitamos alguna vez o bastantes veces,pero no creo que necesites consejos tu mismo te lo dices todo en el ultimo párrafo.
Solo puedo desearte suerte y mucho animo

Arkanjel

Hola, como dice nuestra amiga Emily, a veces todos necesitamos desahogarnos, auqnue sea escribiendo en un foro.

Por lo que veo durante la primaria todo te iva relativamente bien, pero en la secundaria cuando te dabas cuenta de que no encajabas quizas no estabas en en lugar correcto. Por lo que veo tienes una mente a la que le gusta deborar informacion, en tu caso en forma de libros,y bueno es verdad que a esa edad los chabales la mayoria no son asi, solo piensan en pasarlo bien, pero eso no quiere decir que no esistieran mas chabales como tu, en la vida hay gente para todos los gustos, gente que le gusta leer ,estudiar, gente con esa inquituz de saber o de leer, quizas no los supistes encontrar, quizas quisistes integrarte en un grupo que no era el tuyo.

Por lo que veo tienes buena relacion con tu familia, deberias apoyarte mas en ellos, y si te gustaba escribir por que no lo haces de nuevo? si tu dices que en lo que estas estudiando no eres capaz de concentrate, de estudiar, que suspendes por dicho motivo, quizas sea que en realidad eso no te guste mucho no? por que no intentas escribir algo? Si perdiste todo lo demas centrate en algo que te llene y te guste como por ejemplo eso, deja todo lo demas a un lado y lucha por llegar a ser un buen escritor, concentrate en eso, seguro que despues si llegas a ser uno bueno conoceras mas escritores, o escritoras, todo es buscar tu camino, pero si siempre te quedas dudando cual sera y no eliges ninguno, siempre estaras asi, saludos.

elhalcon

uhmm hay mucha obsesion por sentirse querido , yo soy diferente, no me gusta mucho la gente, preferiria vivir en el campo como un hermitaño sin que nadie me moleste, el ruido de la ciudad es detestable, no quisiera ser humano, quisiera ser un animal salvaje que vive de la caza, la gente me apesta, por eso cuando estoy en publico rehuyo, sera miedo? o repulsion por las personas no se? pero a lo que si tengo miendo y pavor terrible es quedarme pobre, por que si vives en la ciudad tienes que tener ingresos, si no ? mueres, eso si tengo miedo. En tu caso solo necesitas una amiga o amigo que te aliente..

espiritulibre

Eres muy joven todavía, jovencisimo. No des la vida por perdida. Aún te pueden suceder muchas cosas buenas. La edad te da otras perspectivas y puede que encuentres a gente semejante a ti.

Animos!

Perezoso

Si , pero que no caiga en el error de esperar a que te pasen cosas buenas, hay que ir a buscar las cosas buenas porque no van a venir por si solas.
Si te quedas diciendo ah no pasa nada , soy joven, ya vendran tiempos mejores y no haces absolutamente nada por cambiar tu vida, seguira igual hasta que decidas hacer algo.
No hay que dejar pasar el tiempo, yo no digo: actua ahora mismo!!! pero casi.Hay que ponerse metas a corto plazo e intentar estar preparado para todo lo que pueda pasar.
Saludos.

vanhelsing

y todo por los ruidos? q loko...
el psicologo no te ayudo por lo q veo. intentaste con terapia de regresiones? deberias probar, ya q todo indica que tu trauma comenzo antes de nacer. saludos!

Marmota

De niño te creias un lider nato, todo indicaba que eras especial y diferente. No te dabas cuenta que era tan solo una fantasía. En la época en la esas fantasias se disipan y te das cuenta que no eres tan inteligente como crees y comienzas a admirar a los demás te aislas, te encierras en lo que consideras tu trabajo: escribir.

Ahora estudias una carrera en donde tus cualidades estan en guerra con la gracia del artista que consigue pasar a la historia. Te sientes retado y quisiras tener un vida memorable, especial y diferente. Pero tu vida y los hechos que la conforman no señalan grandes acontecimientos.

Es posible que tan solo tengas que aceptar que eres uno más, que tu inteligencia y tus virtudes son muy comunes. Quizá así la gente te resulte más cercana y tu seas más accesible para los demás.

Escribes bien pero no mucho mejor que otros foreros. Logras expresarte con claridad, puntualizas correctamente, aveces recaes en una especie de psicodrama épico nada atractivo pero en general mantienes una linea.

No sé. Tienes la suerte de estudiar una carrera interesante, tu facultad está llena de tias, se permite una lectura subjetiva de las cosas....disfrútala y no te atormentes. Que le den por culo al talento y a los poderes mágicos. Eres uno más y la vida es más simple de lo que imaginaste, acéptalo.

Saludos!!

Pájaro sin nido

Me ha gustado tu mensaje. Muy especulativo. Pero…
… Te lo has inventado todo… xD. Permíteme contestar con un no a cada una de las afirmaciones que conforman esos dos párrafos (exceptuando lo de “todo indicaba que eras especial y diferente”, ya que sí, me sentía como mínimo diferente en mi niñez, y lo de especial es demasiado relativo. Pero de veras que todo lo demás se ajusta poco o nada a la realidad).
No obstante, buen intento.

No he hablado ni de mi inteligencia ni de mis virtudes en el presente. Todo lo que digas sobre el tema son suposiciones tuyas. A lo mejor no son tan comunes. A lo mejor no veo a la gente lejos de mí en esos aspectos y sí en otros. A lo mejor no tienen nada que ver con mi precaria situación.

No, no lo acepto. ¿Soy uno más? ¿La vida es más simple de lo que imagino? Todo eso es relativo: fácilmente se puede considerar la vida la cosa más complicada, kafkiana e incomprensible que te puedas echar a la cara, o fácilmente puedes resumirla en unas pequeñas directrices que lo engloben todo. Y repito: ¿soy uno más? Sí, para la sociedad. No, para mis padres. ¿Para mí mismo he de ser uno más? No me voy a resignar a ello, eso me dañaría más que aspirar a algo y no llegar (a menos que mi sistema de creencias y valores -por lo que sé tan válido como el de cualquiera- de un vuelco de 360º).

¿Por qué habrían de dar por culo al talento y a los poderes mágicos? ¿Son la causa de mis pesares? ¿Qué pasa si mi facultad está llena de tías? En mi clase había 80 tías y 10 tíos. De las 80 tías dediqué más de un pensamiento a dos de ellas, y no precisamente por su simpatía, ya que ninguna de las cuales se dignó a hablarme.

Me ha gustado tu mensaje porque es diferente, y aunque pienso que tienes razón en parte (una parte que no te voy a decir cual es porque soy malvado ), también me parece que te has quedado con la cara más superficial de la moneda. Supongo que hablar de mi propia inteligencia me hace parecer pretencioso, supongo que hablar de mis ambiciones literarias me hace parecer un inconsciente, pero es fundamental fijarse en las fechas y no suponer que esas cosas se prolongan más allá de lo mencionado. La inteligencia se corrompe, las ambiciones perecen. La cronología que has leído solo es un poco de ubi sunt con un poco de tono melodramático (ya veo que no te ha gustado... que se le va a hacer): ni representa toda mi vida, ni todos mis problemas, ni todo mi carácter; ni tampoco trata de ser una obra literaria. Con ella solo quise desahogarme un poco y ver qué escribía la gente. Si me insultaban o me decían que no estoy solo ( ni uno me ha dicho que no estoy solo) o qué...

No creo que escriba bien (en absoluto). Ni he dedicado un solo instante en mi vida a tratar de hacerlo (cuando quería ser escritor fue hace años, aunque probablemente seguiría queriendo si creyese que puedo).
No pienso que lo que me hace diferente al resto sea mi inteligencia (pero lo pensé alguna vez).
Ah, y aborrezco la universidad. A pesar de las lecturas subjetivas, de lo interesante que sea lo que estudio y de las tropecientas chicas que abarrotan los pasillos de mi facultad.

Y... siempre acabo escribiendo demasiado. Si son necesarias más explicaciones de por qué no voy a dejar que le peten el ano al talento ni a los poderes mágico comentad algo para que vuelva a sentirme malinterpretado.

¡Gracias por opinar y por los consejos a todos!

AsoSIacionVLFS

ajajaa ajaja
Si Harry Potter fue todo una motivación...
Yo crecí con Harry Potter y los buenos momentos de parte de mi niñez, pubertad y adolesencia fueron por Harry Potter xd


En conclusión: NO MAM...
Tienes mucha vida por delante, demonios, si apenas vas para los 20...
La vida es un viaje, no un destino,
ESO ES TODO





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a Sunako
O más bien a algunos nos hizo seguir creyendo...seguir ilusionandonos, etc Puede ser que fue un refugio que no nos hacía salir, pero a mí para nada me lo arruinó. Por Harry Potter fue que tuve mi época de cyberamigos, por Harry Potter hasta me llegue a reunir con alguien que conocí en internet.
Harry Potter siempre me hacía abrir la boca, así que cuando se hacían debates pottericos en mi secundaria, era divertido...(será que me en esa época en que la gente se me acercaba, se me acercaban puros "nerds" jajaja pero nah es ¡Mentira!
Larga vida a Potter xD (Así como algunos su época u obsesión fue el señor de los anillos, Star Wars, algún anime, alguna serie, algún otro libro, etc, etc)