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19-jun-2013
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Obviamente no se trata de que tengan esa etiqueta pero sí que lo demuestren con sus actos y su forma de pensar.
"La paloma" de Patrick Suskind (lo recomiendo)
Sinopsis:
Cita:
La paloma es la historia de un incidente en París. Una parábola de cotidianidad insólita que se agranda hasta adquirir la dimensión de una pesadilla.
Un personaje singular descubre cierto día la presencia inesperada de una paloma ante la habitación en la que reside. Este percance, imprevisto y minúsculo, cobra proporciones aterradoras en la mente del protagonista, y convierte en una pesadilla pavorosa y grotesca a un tiempo la jornada de su vida, de la que el lector será testigo.
Maestro de la alusión y de lo obsesivo, Süskind revela una vez más su don de edificar, sobre la paradoja o la rareza aparentes, una reveladora metáfora moral del trasfondo de la existencia humana.
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Otro, muy conocido; "el árbol de la ciencia" Pío Baroja
Cita:
Narra en ella la vida de Andrés Hurtado desde el comienzo de sus estudios de medicina. El menor atisbo de felicidad asoma en su existencia vulgar: una facultad agria, una familia poco afectuosa y unos amigos nada generosos. Su propia profesión le sirve para odiar más a los hombres, y sólo junto a Lulú, una muchacha atrevida y que rebosa ternura, encuentra Andrés cierta felicidad.
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19-jun-2013
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Un clásico: El Lobo Estepario de Hermann Hesse.
Una obra que se inscribe dentro del empeño por iluminar la zona oscura de la condición humana a fin de poner al descubierto su carga trágica y su incierto destino. Ser solitario e incomunicado, extraño y extrañado, Harry Haller, el protagonista, se ha convertido en el arquetipo literario en el que se reconocen quienes padecen los devastadores efectos deshumanizadores de una sociedad insolidaria y atomizada.
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19-jun-2013
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Cualquier novela de Michel Houellebecq.
Herzog, de Saul Bellow.
Mis rincones oscuros, autobiografía de James Ellroy.
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Última edición por dadodebaja34918; 19-jun-2013 a las 20:38.
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19-jun-2013
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Mi novela favorita es EL GUARDIÁN ENTRE EL CENTENO de J.D. Salinger, y allí si bien no se muestra a un protagonista que padezca estrictamente fobia social si que es un personaje que no se adapta bien a la sociedad y que trata de buscar su lugar en el mundo. Me siento muy identificado y la verdad es que es una novela genial con una pequeña aventura por Nueva York.
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21-jun-2013
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El Extranjero de Albert Camus. En un mundo dominado por la tecnología y adoctrinamiento en masa, un sujeto (Meursault) se muestra impacible ante todo hecho que le circunda. Reniega de la humanidad, de la felicidad, instalándose en la apatía absoluta.
Ni siquiera socorre a quien requiere de su ayuda. Vive al margen de todo porque no cree en nada ni en nadie. Su comportamiento acabará por llevarle ante las fauces de la peculiar "Justicia" de la sociedad que lo ha aislado.
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21-jun-2013
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Cita:
Iniciado por raul77
Cualquier novela de Michel Houellebecq.
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Houellebecq me parece la hostia en almíbar pero permíteme dudar de que sus protagonistas puedan considerarse inadaptados. Poco hay en sus características que pueda tomarse como indicio de inadaptación: más bien están todos ellos desencantados y gravitando en torno a su propio cinismo.
Quizás un buen apunte sea Hambre, de Knut Hamsun.
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21-jun-2013
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Cita:
Iniciado por antennaria05
Houellebecq me parece la hostia en almíbar pero permíteme dudar de que sus protagonistas puedan considerarse inadaptados. Poco hay en sus características que pueda tomarse como indicio de inadaptación: más bien están todos ellos desencantados y gravitando en torno a su propio cinismo.
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Sí, supongo que Houellebecq es más antisocial que fóbico. La definición de inadaptado es: "individuo que no participa de los objetivos y normas vigentes en su sociedad o grupo." No sé, puede que tengas razón.
De todas formas, de los libros que listé, mi favorito es "Mis rincones oscuros". En mi opinión es lo mejor que ha escrito Ellroy. La parte que cuenta su infancia y adolescencia, y sus trastornos mentales es sobrecogedora.
Describe todo el ciclo de la esquizofrenia. Desde el niño solitario y soñador que vive encerrado en sí mismo hasta las etapas más graves de la enfermedad: las voces, la paranoia, las visiones, y al final el estupor catatónico.
Lo que narra es un auténtico infierno.
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Última edición por dadodebaja34918; 22-jun-2013 a las 15:47.
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22-jun-2013
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Cita:
Iniciado por raul77
Sí, supongo que Houellebecq es más antisocial que fóbico. La definición de inadaptado es: "individuo que no participa de los objetivos y normas vigentes en su sociedad o grupo." No sé, puede que tengas razón.
De todas formas, de los libros que listé, mi favorito es "Mis rincones oscuros". En mi opinión es lo mejor que ha escrito Ellroy. La parte que cuenta su infancia y adolescencia, y sus trastornos mentales es sobrecogedora.
Describe todo el ciclo de la esquizofrenia. Desde el niño solitario y soñador que vive encerrado en sí mismo hasta las etapas más graves de la enfermedad: las voces, la paranoia, las visiones, y al final el estupor catatónico.
Lo que narra es un auténtico infierno.
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Siento discernir, pero que yo sepa James Ellroy no padece ni padeció ningún tipo de enfermedad mental, fue indigente, asesinaron a la madre siendo niño y estuvo con las drogas, quizás hablamos de otro libro y autor.
Apunto "Bajo las ruedas" de Herman Hesse
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Última edición por Lacan; 22-jun-2013 a las 20:58.
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22-jun-2013
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Quizás? Seguro que hablas de otro libro, Thomas.
Es verdad que Ellroy tomaba drogas y algo tendrá que ver eso con sus brotes psicóticos. Yo tuve una vez un brote psicótico provocado por las drogas, así que sé de lo que hablo. Pero nunca oí voces, Ellroy las escuchó durante cinco años.
Te copio unos fragmentos de "Mis rincones oscuros":
"Las voces iban y venían.
Lloyd aseguraba que las voces eran producto de una "psicosis anfetamínica". Para mí formaban parte de una conspiración. El presidente Richard M Nixon sabía que había matado a mis padres y había ordenado a la gente que me acechara. Susurraban a través de micrófonos conectados a mi cabeza. Yo oía las voces, nada más.
No podía desengancharme. Oí voces durante cinco años."
"Caminé por todo Los Ángeles con algodones metidos en las orejas.
Seguía dándole a los inhaladores y tenía buenos momentos antes de que las voces me llamaran.
Entonces caminaba.
Tenía que moverme. Los ruidos del tráfico amortiguaban las voces. La falta de movimiento hacía que se volvieran cacofónicas."
"Las voces eran muy elocuentes: decían que me había follado a mi madre y la había asesinado."
"Lloyd vivía en West Los Ángeles. Acampé en la terraza de su casa. Las primeras alucinaciones las tuve en su cuarto de baño.
Un monstruo saltó del lavabo. Cerré la tapa y vi que más monstruos la atravesaban. Me corría arañas por las piernas. Unas manchas pequeñas revoloteaban ante mis ojos.
Corrí a la sala y apagué las luces. Las manchas se volvieron fluorescentes. Saqueé el bar de Lloyd y bebí hasta perder el sentido. Desperté en el terrado, muerto de miedo."
"Me levanté de una siesta y pensé: "necesito cigarrillos".
Entonces la mente se me quedó en blanco. No puedo recordar nada más.
Mi cerebro golpeaba paredes vacías. No podía visualizar mis pensamientos ni encontraba palabras para expresarlos. Me llevó más de una hora dar forma a esa única y simple elucubración.
No sabía pronunciar mi nombre. No conseguía recordar como me llamaba. No podía dar forma a ese simple pensamiento ni a ningún otro. Mi mente había muerto. Mis circuitos cerebrales se habían desconectado. Era un demente con el cerebro muerto.
Grité. Me tapé los oídos con las manos y grité con voz bronca. Seguía debatiéndome con ese simple pensamiento.
Lloyd subió al terrado. Lo reconocí. No lograba recordar su nombre ni el mío ni ese sencillo pensamiento de hacía una hora.
Lloyd me bajó a su casa y llamó a una ambulancia. Llegaron los enfermeros y me ataron a una camilla."
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Última edición por dadodebaja34918; 22-jun-2013 a las 22:38.
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22-jun-2013
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Cita:
Iniciado por raul77
Quizás? Seguro que hablas de otro libro, Thomas.
Es verdad que Ellroy tomaba drogas y algo tendrá que ver eso con sus brotes psicóticos. Yo tuve una vez un brote psicótico provocado por las drogas, así que sé de lo que hablo. Pero nunca oí voces, Ellroy las escuchó durante cinco años.
Te copio unos fragmentos de "Mis rincones oscuros":
"Las voces iban y venían.
Lloyd aseguraba que las voces eran producto de una "psicosis anfetamínica". Para mí formaban parte de una conspiración. El presidente Richard M Nixon sabía que había matado a mis padres y había ordenado a la gente que me acechara. Susurraban a través de micrófonos conectados a mi cabeza. Yo oía las voces, nada más.
No podía desengancharme. Oí voces durante cinco años."
"Caminé por todo Los Ángeles con algodones metidos en las orejas.
Seguía dándole a los inhaladores y tenía buenos momentos antes de que las voces me llamaran.
Entonces caminaba.
Tenía que moverme. Los ruidos del tráfico amortiguaban las voces. La falta de movimiento hacía que se volvieran cacofónicas."
"Las voces eran muy elocuentes: decían que me había follado a mi madre y la había asesinado."
"Lloyd vivía en West Los Ángeles. Acampé en la terraza de su casa. Las primeras alucinaciones las tuve en su cuarto de baño.
Un monstruo saltó del lavabo. Cerré la tapa y vi que más monstruos la atravesaban. Me corría arañas por las piernas. Unas manchas pequeñas revoloteaban ante mis ojos.
Corrí a la sala y apagué las luces. Las manchas se volvieron fluorescentes. Saqueé el bar de Lloyd y bebí hasta perder el sentido. Desperté en el terrado, muerto de miedo."
"Me levanté de una siesta y pensé: "necesito cigarrillos".
Entonces la mente se me quedó en blanco. No puedo recordar nada más.
Mi cerebro golpeaba paredes vacías. No podía visualizar mis pensamientos ni encontraba palabras para expresarlos. Me llevó más de una hora dar forma a esa única y simple elucubración.
No sabía pronunciar mi nombre. No conseguía recordar como me llamaba. No podía dar forma a ese simple pensamiento ni a ningún otro. Mi mente había muerto. Mis circuitos cerebrales se habían desconectado. Era un demente con el cerebro muerto.
Grité. Me tapé los oídos con las manos y grité con voz bronca. Seguía debatiéndome con ese simple pensamiento.
Lloyd subió al terrado. Lo reconocí. No lograba recordar su nombre ni el mío ni ese sencillo pensamiento de hacía una hora.
Lloyd me bajó a su casa y llamó a una ambulancia. Llegaron los enfermeros y me ataron a una camilla."
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Lo que te quiero decir es que el libro se centra más en la muerte de su madre, su depresión y su vida sin rumbo a partir de ahí, pero no leí nada de su esquizofrenia. Las alucinaciones y paranoias como los dos sabemos son posibles efectos de las drogas, no creo que estuviese mal de la cabeza.
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