Y no se reforma nunca esa escoria. Hace unos días intentaron gastarme una broma telefónica como si no reconociera sus asquerosas voces.
Infraseres que en persona se muestran amables pero que de espaldas siguen jodiendo de diferentes formas. Pero claro, si les acusara sin pruebas quedaría como un loco, así que...
De esta forma es imposible dejar el odio de lado y mira que lo he intentado.
Pero defenderse no servía de nada, pues la gente que se defendía acababa recibiendo palizas a la salida de gente de otros institutos llamados por los acosadores.
Y obviamente, los profesores castigaban y expulsaban al ser solitario y antisocial que provocó la llegada de seres de otros institutos para pegarse con ellos.
Pero claro, pobres profesores, no tienen la culpa de nada, si no saben nunca lo que pasa, por eso mejor achacan la culpa a la persona con la que menos repercusiones van a tener.
Y luego la gente se sorprende de cuando hay casos de gente que recibe acoso y acaba matando a sus compañeros y/o profesores