Cuando yo vivía en Centroamérica sí me intentaron robar un buen par de veces, como a cualquier otra persona de ese país.
Y puedo decir que en momentos así, uno actua como menos se imaginaba que sería capaz (yo incluso estuve a punto de cortarle el cuello a alguien, ya estaba en posición con la distancia calculada, la vena calculada, y la cuchilla tan apretada con los dedos que casi me los corto, cuando el ladrón se dio la vuelta y se fué....).
Además, creo yo que siendo tan paranoica y desconfiada como soy, he evitado que me ocurran muchos más, y desde que estoy aquí en España hace 3 años, me han intentado robar disimuladamente pero me he dado cuenta enseguida. Creo que voy mucho más alerta que las personas "normales".
Y si voy tarde en la noche por una calle solitaria, es increíble cómo todos mis sentidos se agudizan y se tensa el cuerpo listo para actuar en defensa propia... Yo creo que la gente normal va a su bola y cuando menos se lo esperan !!!Zas!!!, los atacan.
En ese sentido creo que llevamos ventaja, por estar tan atentos a nuestro entorno y anticipar cualquier cosa que pueda ocurrir en contra nuestra.
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