He aquí una pequeña lista de algunas ocasiones en las que puede que te encuentres inmovilizado.
Oscilan entre menores y mayores estados de inmovilidad.
Estás inmovilizado cuando...
Te pasas el día sentado en la casa pensando en tus problemas.
No haces el amor y te gustaría hacerlo.
No te atreves a presentarte a una persona que te atrae.
Evitas hablar con alguien aunque te das cuenta de que un sencillo gesto amistoso mejoraría vuestra relación.
No puedes dormir porque algo te preocupa.
Te tiemblan las facciones o estás tan nervioso que no funcionas como quisieras.
La inmovilización abarca un amplio territorio.....